Hola a los niños

Televisa se anticipa al 2000. Dentro de su proyecto Milenio Televisa , pueden verse en pantalla las cápsulas de Niños 2000. El lema, “los niños damos el brinco al nuevo milenio”. El equipo es de no más de 30 personas y según su director, Raúl Estrada, el presupuesto también es pequeño. Estrada define las cápsulas como una campaña social, que trabaja con pocos recursos y se enfoca a la imagen corporativa de Televisa.

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Eduardo Meza, productor de programas, hace hincapié en este altruismo, aunque no descarta algún patrocinador. En las cápsulas algunos niños estrellas dan ideas para mejorar la convivencia social.

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Raúl Estrada considera importante que la televisión transmita valores positivos. Lo mismo se pretende hacer con Plaza Sésamo, que si bien se apoya 80% en la publicidad, es para Televisa uno de los programas “más caros y que menos reditúa”. La familia nuclear o la madre soltera son algunas de las modernidades de Plaza Sésamo, cuyas nuevos capítulos tienen un tono más latinoamericano. Según su director, Eduardo Meza, se trata de un proyecto caro, sin utilidades, pero estratégico para la empresa. El programa cuesta cerca de la mitad de una telenovela.

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El equipo de Plaza lo componen 20 personas en producción, 12 guionistas, 10 en el área de investigación, 50 en servicios y técnicos y unos 15 actores adultos y 60 niños. Sin estar peleado con los patrocinios –Coca-Cola ya trabajó con ellos–, hay algunas normas.

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Una marca de mamilas o de leche en polvo no puede anunciarse mientras se emite Plaza Sésamo porque el programa trata de inculcar la lactancia materna, por ejemplo.

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Plaza Sésamo está en su sexta etapa. La séptima se produce desde ahora para que vea la luz en abril del 2000. Cada temporada tiene un tema, y en la próxima será la diversidad humana, tan relevante en países como México.