Las terapias alternativas ya no son exclusivas de los humanos. Un creciente número de perros y gatos han encontrado remedio a sus males en tratamientos como la homeopatía y la acupuntura.
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La importancia de estas nuevas terapias ha sido tal que el Instituto Nacional de Medicina Tradicional China (INMTCH) cuenta con un área veterinaria en la que se analizan las últimas tendencias en la materia.
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“La homeopatía es para todo. Hemos atendido animales desahuciados, paralíticos, con problemas neurológicos, artritis, epilepsia; y aunque hay enfermedades que no se curan con este medio, podemos dar al animal una mejor calidad de vida”, explica Sussane Rodekohr, directora académica de dicha división.
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A juicio de la experta, egresada de la Universidad de Freire, Alemania, las terapias de este tipo, además de ser más baratas que las de la medicina alópata, no irritan el estómago de la mascota ni provocan reacciones secundarias. Explica que el uso de disciplinas alternativas puede servir para corregir problemas de comportamiento, vértigo, traumas, nervios y estrés.
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“El medicamento es básicamente el mismo que se usa para los humanos, sólo que a las mascotas se les debe dar en cantidades muy pequeñas. Muchas veces la gente que trae a sus perros me pide medicina también para sus familiares”, cuenta la entrevistada.
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A diferencia de la medicina común, los tratamientos alternativos pueden aplicarse a todas las especies, desde perros y gatos hasta peces, aves, caballos o vacas. Desde luego, los pacientes más comunes son felinos y canes.