Sin falta, los días 10 de cada mes, Eloy Castro se forma en la fila del banco para recibir su pensión de $2,800 pesos. Después de 31 años de trabajo en la Dirección General de Reclusorios del DF, don Eloy cuenta los billetes. No le alcanzan para mucho. A los 62 años, despierta cada día con dos preocupaciones: pagar la primaria de su nieta Karen y la colegiatura de su hija María de los Ángeles, que estudia para secretaria.
- Pese a su edad, buscó empleo como portero y vigilante de un condominio donde le pagan $1,000 pesos a la quincena. “Esto me ayuda porque la pensión del ISSSTE no es suficiente”, dice.
- Como don Eloy, más de 360,000 ex trabajadores del servicio público tendrán que esperar tiempos mejores para que aumenten sus percepciones porque el presupuesto de este año no incluyó recursos adicionales.
- Los diputados se acusan mutuamente de haber excluido a los ex trabajadores del Estado. El priísta Guillermo Barnés, culpa a los diputados del PAN y PRD: “Se impusieron el cerebro de Pablo Gómez y el hígado de Medina Plascencia”.
- Juan Bueno, diputado del PAN, afirma que el PRI presentó muy tarde una propuesta de apoyo a los pensionados del ISSSTE “Al cuarto para las 12 sacaron planteamientos de la manga para no quedar en evidencia”. Amabilia Terrazas, del PRD, dice que su partido pugnó, desde el inicio, por incrementar recursos a todos los retirados y asegura que “los que se niegan a cambiar el presupuesto son el Ejecutivo y el PRI.
- Por lo pronto, los ex trabajadores del ISSSTE hacen votos para que los legisladores se pongan de acuerdo y canalicen recursos a su fondo de pensiones que tiene un déficit superior a los $9,000 millones de pesos.