El inicio del año sirve como marco para que todas las armadoras del mundo presenten a los medios especializados el futuro de la industria automotriz.
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Este año fuimos testigos de la introducción al mercado norteamericano de 21 vehículos, entre los que destacan el lujoso Maybach, que entra al continente de la mano de DaimlerChrysler; la Touraeg, con la que Volkswagen se incorpora al mundo de camionetas utilitarias; la Chevrolet Equinox; la Station Wagon de la Clase E de Mercedes Benz con la tecnología de punta que caracteriza a la marca; y el nuevo Rolls Royce Phantom.
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Ahora bien, los autos “concepto” que ahí se presentaron fueron capaces de dejar con la boca abierta a más de un periodista asistente. Tal parece que la industria de América del Norte está ocupada en presentar autos de alta potencia. Por ejemplo el impresionante Sixteen, de Cadillac, con 16 cilindros que generan 1,000 caballos de fuerza; tiene la particularidad de que el motor puede trabajar con cuatro, ocho o los 16 cilindros, obteniendo un mejor consumo promedio de combustible. Dodge, para no quedarse atrás, presentó el Tomahawk, una especie de motocicleta de cuatro ruedas y 500 caballos de fuerza, con 10 cilindros que en teoría alcanzan 600 kilómetros por hora. Otra que llamó la atención fue la nueva minivan Sienna, de Toyota, que posiblemente pudiera hacer su aparición en México para competir directamente con la Honda Odyssey.
Nissan se incorpora al segmento de las pick up de gran capacidad con su nueva Titan, equipada con un motor V8 de 300 caballos de fuerza; este modelo pretende competir con los tradicionales fabricantes de tal tipo de unidades: GM, Dodge y Ford.
He aquí algunas muestras de los esfuerzos de la industria automotriz internacional presentadas en el North American Internacional Auto Show de Detroit en enero de este año, que cada vez es más impresionante y llamativo.