“Aquí hasta la persona que barre tiene que sudar ratings ”, dice vehemente la ejecutiva del consorcio televisivo, con más de 20 años de experiencia laboral en medios, en agencias como Leo Burnett, McCann Erickson, J. Walter Thompson, Ogilvy & Mather, Noble & Asociados y Media Planning.
-
Su paso por estos corporativos le enseñó los tejes y manejes de cómo optimizar los presupuestos publicitarios. Esa visión le abrió las puertas en Televisa, pues se requería conocer lo que estaba pensando el anunciante, con base en argumentos, análisis y estudios de las audiencias, algo a lo que el consorcio no estaba acostumbrado. En junio de 1997 llegó, como dice ella, a “crear una cultura de audiencias de televisión dentro de la televisión, específicamente desde el punto de vista de ventas, no de programación”. Darle herramientas a los vendedores, de cómo se comportan los programas, cómo son los públicos, qué busca el anunciante, cómo diseñar el mejor plan para que el cliente lo encuentre en Televisa.
-
Su departamento, dependiente de la vicepresidencia de Comercialización y Ventas, es un soporte técnico para mantener informado de las sofisticaciones del mercado al área de ventas, qué sepan que está pasando con los ratings y cuál es la trayectoria de los programas. La única forma de vender el producto, argumenta Benítez, es que “toda la empresa sude ratings ”.