Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Para empezar

-
mar 20 septiembre 2011 02:54 PM

Entre el último alimento de la jornada anterior (cena) y la primera del siguiente, existe un lapso de por lo menos ocho horas, durante el cual el organismo funciona a un ritmo muy bajo a partir de las reservas de glucógeno del hígado y de grasa corporal.

-

Dado que casi no existe ningún tipo de actividad física mientras dormimos, el metabolismo consume aproximadamente 80 kilocalorías por la noche; sin embargo, al iniciar un nuevo día se requiere un promedio de 120. Por esta razón el desayuno se considera la comida más importante: proporciona el vigor suficiente para llevar a cabo nuestras tareas matutinas.

-

Los principales problemas del ayuno consisten en que la falta de energía tiende a compensarse más tarde con alimentos ricos en grasa; se disminuye la disponibilidad de glucosa, primordial fuente alimenticia para el cerebro; la concentración de colesterol en la sangre crece y se obstaculizan los procesos de rendimiento intelectual.

Publicidad

-

Un desayuno adecuado provee por lo menos 25% de los nutrientes que consumimos en 24 horas; la cena otro tanto y la comida el restante 50%. Es preciso combinar los tres grupos de alimentos en cada caso y en orden decreciente: cereales, frutas, verduras y leguminosas; productos de origen animal y, por último, azúcares.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad