Un piloto de American Airlines notó un sabor extraño en su café. Era heroína, que alguien había escondido en el termo. Gracias a ese accidente y una investigación de dos años, la policía de Estados Unidos descubrió una red creada por un grupo de empleados para distribuir cocaína, heroína, marihuana y hasta armas, utilizando los aviones de la empresa.
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“No tenían por qué preocuparse de que los capturara la aerolínea. Ellos eran la aerolínea”, comentó el diario The New York Times.
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El trabajo era sencillo. Los empleados metían la droga en las bandejas de comida, los termos del café, los compartimentos de carga y hasta junto a los cables del avión. Según los reportes, alguna vez lograron transportar tres granadas como equipaje de mano.
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En agosto, agentes de la policía federal detuvieron en Miami a 58 empleados de la aerolínea y de la empresa de cocina aérea, Sky Chef, acusados de conspiración y tráfico de drogas y de armas.
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