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Señor Q (1075)

El riesgo del cambio, un trabajador encorbatado y las señales de un despido.
lun 26 septiembre 2011 02:43 PM

ESTIMADO SEÑOR Q:

Llevo 10 años en la misma empresa, donde he pasado por tres áreas diferentes. En mi posición actual tengo tres años y dos meses, pero me están promoviendo a otra área, donde ya trabajé durante cinco años como parte del equipo. Es un reto grande (incluye atención a clientes, subordinados, administración de la oficina y trabajar con sindicatos y otros departamentos) y quizá por eso mi jefe dice que, antes de cambiarme, debo pensarlo bien. Aparentemente, mi nuevo jefe no es talentoso y no conoce nada del área, entonces no podrá apoyarme y yo me podré ahogar. ¿Qué decisión debo tomar? ¿Cambiarme de área y arriesgarme a no poder manejar todas las situaciones? ¿O mejor no quemarme y quedarme en donde estoy? Una aclaración: ahora cumplo horario de oficina (nueve horas) y casi no trabajo los fines de semana. En la nueva posición, el horario en promedio sería de 10 a 12 horas diarias.

Desangelada

Querida Desangelada:

¿Por qué dices que podrías "quemarte"? Si no confías en ti misma, quédate donde estás, a gusto y valorada. Pero si confías en ti misma y tienes ganas de progresar, piensa en las siguientes dos cosas. Una es que no existe el cargo ideal, sin problemas o desafíos: para eso te envían allí, para que pongas el lugar en orden. La otra es que es normal que tu jefe actual hable mal de tu jefe futuro, porque no quiere perderte y necesita exagerar sus defectos para retenerte. Eso habla bien de ti, y por eso el Señor Q cree que deberías examinar más detenidamente la posibilidad de aceptar la promoción. Se ve tu energía y se ve tu ambición: sólo quienes aceptan el riesgo de ‘quemarse' pueden conocer el calor.

Acalorado, Q

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ESTIMADO SEÑOR Q:

Mi nuevo jefe no usa corbata y nos pide a nosotros que tampoco la usemos. Yo nunca quise usar corbatas, pero mis compañeros y los jefes intermedios se resisten a cambiar: están todo los días (menos los viernes: casual friday) cada uno con la suya. ¿Qué hago? ¿Me zambullo?

Acorbatado

Querido Acorbatado:

¡Zambúllete! Si el jefe no usa corbata y a ti te molesta usar corbata, entonces no hay motivos para que lo sigas haciendo. Empieza mañana mismo: dentro de unos meses serás considerado un pionero.

En camiseta, Q

ESTIMADO SEÑOR Q:

Tengo la sospecha de que mi jefa no me quiere. Nuestras personalidades nunca congeniaron del todo bien (yo soy más bien bromista e informal; ella es seria y disciplinada), pero creo que últimamente aquel disgusto personal se ha transformado en un desdén profesional. Una señal: durante siete años fui a la conferencia anual de ventas de la compañía, pero hace dos semanas mi jefa eligió a otra compañera para ir a Guadalajara. Otra: el mes pasado quise conversar con ella sobre mi futuro en la empresa, qué posibilidades de desarrollo veía para mí, porque le dije que me sentía un poco estancado. Ella me respondió que no había pensado en el tema, y que en algún momento me daría una respuesta (que, por supuesto, no llegó nunca). ¿Qué debo deducir de este comportamiento? ¿Debo preocuparme por mi futuro o cree usted que los jefes son así y que en algún momento la cosa puede cambiar?

Bromista pero profesional

Querido Bromista:

El Señor Q piensa que, lamentablemente, sí deberías preocuparte un poco por tu futuro. Las señales que envían los jefes a sus subordinados son a menudo más conscientes de los que los subordinados creen. Hay gente que un día oye de su jefe una frase como "Tu rendimiento debería mejorar" y, un par de meses más tarde, se sorprende cuando es despedida. Por eso, como dice la especialista estadounidense Alison Green, hay que tomarse en serio las señales de los jefes. Si tu jefe hace pocos cumplidos sobre tu trabajo o nunca te pide consejo o no muestra interés sobre tus problemas, entonces estás en problemas, dice Green. Los buenos jefes son capaces de tener conversaciones adultas con sus subordinados y explicarles su situación. Pero la mayoría de los jefes no son tan buenos, o tienen problemas de comunicación: aprender a leer sus señales es un trabajo fundamental para saber dónde estás parado.

Comunicativo, Q

SEÑOR Q encuentra solución a los problemas que rodean la vida profesional. Si él no tiene la respuesta, seguramente nadie la tendrá.

¿Alguna pregunta? Escribe a: senorq@expansion.com.mx

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