Triunfar en la crisis
Respiras agitadamente, la tensión y el nervio te invaden. La adrenalina no te permite dar un respiro para pensar en tus problemas, porque en ese momento tu concentración debe ser absoluta. Es una emergencia y puede pasar en la sala de urgencias de un hospital o en la sala de juntas de un corporativo. En ambos tienes que desprenderte de tu emoción y de tus sentimiento, saber por qué lo haces y para quién.
"A diferencia de un CEO, para nosotros lo más importante no son los recursos, sino la vida del paciente", dice Carlos Lijtszain, jefe corporativo de la división de urgencias del centro médico ABC. Explica que ninguna crisis es igual y lo que aprendiste a lo largo de los años es lo que te enseñará a enfrentar cada una y basado en el trabajo en equipo y liderazgo, aprenderás a salirte de las emociones y concentrarte para actuar correctamente.
Para atender una crisis, Lijtszain recomienda:
- Hacer un diagnóstico para determinar qué está pasando y saber si la urgencia es real.
- Comunicar con claridad al equipo las acciones a seguir para que las quejas y mal entendidos caigan a cero.
- Conservar siempre la calma.
"Debe haber una voz cantante", señala, esta persona será quien organice al equipo y decida qué se hace y qué no, además de llamar la atención en caso de omisiones o errores.
Un líder debe mostrar certeza al dirigir; ser responsable de todas las decisiones y resultados; tener conocimiento y profesionalismo, dice Lijtszain, basado en su propia experiencia. Al igual que un CEO, el médico tendrá muchas soluciones para un problema, la diferencia radica en que el director de una empresa escoge la mejor para él o para su compañía, pero el médico debe elegir lo mejor para su paciente. Al final, la base para decidir en una crisis debe ser la misma: "Usa tu cerebro, no tu instinto", concluye.