Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

El enemigo que frena a Cinépolis

El director de la cadena de cines critica la regulación en los países del G-20 donde ha invertido; Alejandro Ramírez también habla sobre la inseguridad en México y cómo impacta en su organización.
lun 02 marzo 2015 06:00 AM
“Nosotros afortunadamente, hemos enfrentado un solo caso de intento de extorsión en la frontera norte (de México)”, dice Alejandro Ramírez. (Foto: Cuartoscuro)
cinepolis

Cinépolis ha crecido a la mitad de la velocidad debido a la sobrerregulación y el proteccionismo de algunos países del G-20, dice el director de la cadena Alejandro Ramírez. “Habríamos generado el doble de empleos en estos cinco años”, asegura.

El ejecutivo dice que de los países en donde su empresa tiene inversiones, que son 10 de América Latina, Estados Unidos e India , los más amigables para hacer negocios son México y Estados Unidos. Tienen “menos regulación, con menos barreras al comercio, no hay tantas barreras arancelarias”.

“En otros países tenemos que pagar aranceles de 40 o 50% para importar un proyector. En muchas partes de Latinoamérica pagamos 40%. Las mejores butacas son las mexicanas, entonces las mandamos a todos lados y a veces pagamos muchísimo para importarlas”, explica en charla con la revista Expansión para su edición del 19 de febrero.

“Si no fuera por tanta burocracia innecesaria, habríamos invertido el doble”, afirma.

Sobre la inseguridad en México, dice que es un tema que definitivamente inhibe la inversión , aunque hasta el momento no ha impactado a Cinépolis.

Lee: Cinépolis llega a ocho ciudades de Chile tras compra

Publicidad

Supone que es temor lo que detiene a los empresarios para hablar públicamente del problema y asegura que aunque no levanten la voz a los medios, sí lo hacen ante las autoridades.

En noviembre de 2014, el CEO dio un discurso en la cumbre del G-20, en Australia. Era la primera vez que el encuentro de líderes globales que reúne a las ocho mayores economías del mundo -Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Rusia- con 11 países emergentes -como México, Brasil, China e India-, incluía a líderes empresariales en su agenda.

Rodeado de mandatarios como Barack Obama, Angela Merkel, Vladimir Putin y Dilma Rousseff, el director de la cadena de cines habló de lo que había aprendido con su experiencia en Cinépolis: que en el mundo de hoy, la confianza no es suficiente para invertir, sino que se necesita un entorno económico que facilite hacer negocios. Que cada regulación innecesaria genera una oportunidad de corrupción. Y que Cinépolis habría invertido el doble si no fuera por el proteccionismo de algunos países del G-20.

Lee: Alejandro Ramírez en Los 100 empresarios más importantes de México

Barreras globales

¿Qué barreras burocráticas afectan a Cinépolis?
(En el discurso del G-20) les dije que Cinépolis tiene inversiones en cuatro economías del G-20 (México, Estados Unidos, India y Brasil). Les di ejemplos de entornos sobreprotegidos, sobrerregulados y sobrefiscalizados que enfrentamos como empresa.

En Brasil, en este momento tenemos un cargamento de queso para nachos -el segundo snack que más vendemos después de las palomitas- que tiene ya dos meses en la aduana. No podemos liberarlo porque el oficial de aduanas dice que la licencia que llevamos usando por cuatro años para importar todo ya no es válida, y que tenemos que tramitar otra licencia que lleva alrededor de seis meses. La empresa es mexicana, el queso viene de Estados Unidos y está parado en Brasil. Tienes tres países involucrados. Hemos importado, durante años, proyectores, pantallas y butacas mexicanas.

En India, tenemos que realizar 23 trámites burocráticos en 23 oficinas distintas para poder abrir un cine. Teníamos uno que estaba listo para abrirse desde febrero (de 2014), y en noviembre seguíamos sin poder abrirlo, porque nos faltaba la firma número 23, que era la del departamento de policía local.

Por cuestiones de diplomacia, no mencioné los países en su momento, pero sí hablé de los casos.

Después de su discurso, ¿qué feedback recibió de los líderes políticos?
Cuando terminé, el primer ministro australiano dijo que ése es el tipo de ejemplos que deberíamos solucionar los líderes del G-20 para que nuestras empresas puedan invertir más. Como yo no había revelado los países, me dijo que ojalá en la cena tuviera oportunidad de platicar con los líderes correspondientes. Efectivamente, cuando pasé a la recepción, se me acercaron de muy buena fe varios funcionarios del gobierno brasileño para ofrecerme apoyo.

Igualmente, tuve la oportunidad de conocer al primer ministro Modi, de India. El ejemplo que di de los 23 trámites de un cine es de Bombay. Afortunadamente, ya abrimos el cine de India, funcionó el discurso. El tema es que esto se podría hacer de manera más general. Son sólo dos ejemplos, pero reflejan lo que, a distinta escala, enfrentamos los empresarios.

 ¿Tener menos regulación frena la corrupción?
Ayuda. La regulación necesaria es necesaria, es decir, hay cierta regulación imprescindible. El problema es cuando se regulan cosas absurdas, y eso te genera una oportunidad de corrupción.

Hay muchos ejemplos, como el que te digo en India: 23 firmas para abrir un cine. Claro que nos tuvieron 10 meses esperando, porque no te firmaban. Quieren exasperarte para ver si ofreces algo. Nosotros tenemos un código de ética que aplicamos en todas partes, entonces tuvimos que esperar. Yo pagué 10 meses la renta del cine, pero el cine no estaba generando nada.

Además, tuve a todos mis empleados contratados por tres meses porque esperaba abrir todas las semanas, hasta que tuvimos que dejarlos ir.

La inseguridad y los empresarios

En México, muchos empresarios dicen que los problemas que más les afectan son la delincuencia y la poca respuesta de las autoridades. ¿Está de acuerdo?
Sin duda. Hay zonas del país donde el Estado de Derecho es muy frágil, y en esas zonas no ha habido tanta inversión, y se puede constatar en un mapa. Nosotros, afortunadamente, hemos enfrentado un solo caso de intento de extorsión en la frontera norte, uno, y estamos en más de 80 ciudades. No nos podemos quejar en ese sentido, y tenemos presencia en estados que tienen problemas de seguridad. Afortunadamente, no nos ha impactado. Pero sí es un tema que inhibe la inversión. El estado de Querétaro es de los más seguros del país y atrae mucha inversión. Creo que va un poco de la mano. Otros estados, como tristemente Michoacán o Guerrero, tienen una mayor problemática.

Sin embargo, llama la atención que muy pocos empresarios hablan públicamente del tema. ¿A qué se debe?
No sé, hay que preguntarle a los empresarios que no han querido hablar, pero supongo que es por temor. Todo lo que tiene que ver con el crimen organizado, a la gente le da miedo.

¿Existen suficientes plataformas para hablar abiertamente de la inseguridad?
Sí, hay muchos foros empresariales, y yo he ido a muchos. Tanto pequeños, medianos y grandes empresarios han externado sus problemas, como que les cierran la carretera y les piden dinero.

Los empresarios sí les dicen a las autoridades sus problemas de viva voz. Quizá no a los medios, pero sí a las autoridades.

Sobre escándalos como la desaparición de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, en Guerrero, y la supuesta matanza de más de 20 personas en Tlatlaya, en el Estado de México, a manos del Ejército, ¿se han manifestado los empresarios?
Yo creo que todos lo hemos hecho a través de las cámaras gremiales en las que participamos. Por ejemplo, el Consejo Coordinador Empresarial y varias cámaras. Lo hemos hecho incluso antes de que sucedieran estas tragedias, y esto simplemente es un reflejo o llamada de atención de que el problema es mayor de lo que imaginamos. Todos sabemos que hay un problema de inseguridad, pero esto es como la gota que derramó el vaso y nos obliga a ver que el problema del Estado de Derecho es muy profundo y todos como sociedad tenemos que atacarlo. Todos tenemos que participar, si no el país no va a poder seguir avanzando.

Reformas, ¿satisfactorias?

En su discurso del G-20 puso a México de ejemplo cuando hablaba de reformas de gran alcance: desde la educativa y la energética hasta la laboral y de telecomunicaciones. ¿Está satisfecho con las reformas?
Creo que las reformas son una gran noticia. Lo mencioné en la cumbre porque me pidieron que mencionara lo que México ha hecho para transformar el entorno competitivo del país. Creo que las reformas de los últimos años son de gran calado, y no debemos perderlas de vista por lo mucho que nos falta por hacer en la parte del Estado de Derecho.

La educativa puede ser la más transformadora de este país. Va a tardar tiempo, pero sienta las bases de un país moderno, meritocrático y competitivo, que realmente le dé oportunidades de movilidad social a los jóvenes. La energética me parece importantísima para aprovechar los recursos del país, y todas las demás son fundamentales para México.

Es muy importante que nos volvamos a enfocar en la ejecución de esas reformas. Algunas ya están aprobadas, otras van a tener dificultad para aterrizarlas con las oposiciones, como la educativa en Guerrero. Va a haber obstáculos, pero tienen el potencial de ser transformadoras si se ejecutan bien. Falta cultura de legalidad y no debemos perder de vista que falta mucho por hacer.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad