Roddick vence a Federer y sueña con más
El tenista Andy Roddick siempre creyó en sus posibilidades de ganar torneos grandes, pese a ser considerado por muchos analistas como un ganador efímero.
La confianza del gran sacador estadounidense recibió una gran estímulo tras su victoria del jueves ante el suizo Roger Federer, la cual le permitió terminar con una seguidilla de derrotas contra el número uno del mundo y aumentar las esperanzas de sumar otro título a su carrera, en la que ganó el Abierto de EEUU en el 2004.
Roddick superó al número uno del mundo por 7-6 (-), 4-6 y 6-3 en los cuartos de final del Abierto de Miami para acumular apenas su segunda victoria en 17 partidos contra el suizo ganador de 12 grand slams.
"A diferencia de la mayoría, nunca abandoné las esperanzas de ganar un grand slam. Por eso entrené aún en los peores días después de que Roger me venció", confesó el jugador estadounidense.
Antes del triunfo del número 6 del ranking ATP frente a una entusiasta multitud en Miami, Federer había dominado completamente a Roddick en el historial, dejándole sólo seis de los 43 sets que jugaron entre sí.
Sólido estado de forma
La última vez que Roddick había vencido a Federer fue en 2003 en las semifinales del Masters Series de Montreal, pero el estado de forma del estadounidense esta temporada está muy sólido, habiendo ganado los torneos de San José y de Dubai.
Más importante aún es que obtuvo triunfos contra los tres mejores del mundo: Federer, el español Rafael Nadal y el serbio Novak Djokovic.
Roddick, quien ganó el título en Miami en el 2004, admitió haber derramado un algunas lágrimas tras su victoria del jueves, habló también de sus sentimientos.
"No voy a actuar como si hubiera solucionado un problema", dijo. "¿Noches sin dormir? No. Por suerte, siempre pude separar mi tenis de mi vida. En general, nunca siento pena por mí mismo. Tengo una existencia muy afortunada", expresó Roddick.
