Otra huelga se cierne sobre Hollywood
Los principales estudios pusieron fin el martes a tres semanas de conversaciones con el Sindicato de Actores de Cine y Televisión y lo culparon por "demandas irracionales", avivando las tensiones laborales en Hollywood tras una huelga de guionistas que duró 100 días.
Las noticias sobre el quiebre de las conversaciones se conocieron por un comunicado del agente negociador de los estudios, la Alianza de Productores de Películas y Televisión (AMPTP por sus iniciales en inglés), unos 90 minutos después de que venciera el plazo autoimpuesto.
Los principales puntos de desacuerdo citados por ambas partes incluyen las propuestas del sindicato para pagos "residuales" más generosos para los actores por ventas de DVDs y por contenidos de descarga online.
El Sindicato de Actores (SAG por sus iniciales en inglés) también presiona por nuevas leyes que regulen el uso de videoclips e imágenes de archivo en Internet por parte de los estudios y una compensación por dicho material.
La AMPTP dijo que "se ha hecho un progreso insuficiente para extender las negociaciones" por un tercer plazo, y que las conversaciones "iban para atrás" por la negativa del SAG a adoptar los términos de los acuerdos laborales ya alcanzados por guionistas y directores.
"Con la continua adhesión del SAG a demandas irracionales (...) mantener las negociaciones no tiene sentido", dice le comunicado, agregando que los estudios "han ofrecido reiniciar las negociaciones con el SAG en una fecha cercana".
El presidente del SAG, Alan Rosenberg, dijo más tarde que estaba "terriblemente decepcionado".
"Era nuestra intención llevar adelante esta negociación hasta su conclusión, y sentía que estábamos progresando", dijo Rosenberg a Reuters en una entrevista telefónica. "Esta interrupción hará más difícil alcanzar un acuerdo, aunque sigo siendo optimista", agregó.
Preguntado sobre la posible escalada del descontento laboral o la interrupción de tareas, Rosenberg dijo: "No quiero pensar o hablar sobre una huelga hasta que esté convencido de que no podemos progresar en las negociaciones. Y aún no he llegado a ese punto".
El actual contrato que cubre a unos 120,000 actores de cine y televisión tiene una antigüedad de tres años y expira el 30 de junio.
