El verdadero costo de la tinta ‘pirata’
Utilizar consumibles 'pirata' en los sistemas de codificación y marcaje de producto terminado disminuye el tiempo de vida útil de las impresoras entre 20 y 25%, incrementando el mantenimiento de las máquinas y uso de refacciones, asegura Eduardo de la Torre, director general de Videojet. El directivo advierte que el uso de tinta apócrifa no sólo acelera el deterioro de la máquina, sino que también disminuye su eficiencia: mientras que con cada litro de tinta original se imprimen 55 millones de caracteres, con las tintas pirata la cifra se reduce 10%.
Esto se debe a que los consumibles originales generalmente son desarrollados y probados específicamente para usarse con las máquinas, garantizando de alguna manera que funcionen sin problemas, cosa que no curre con las tintas y pigmentos apócrifos, explica el directivo de esta empresa proveedora de equipo codificador.
Sin embargo, debido al aún considerable precio de los consumibles originales, la tinta remanufacturada, compatible, y, por supuesto, falsificada, ha ganado terreno, acaparando actualmente de 10 a 15% del mercado, explica De la Torre.
Según datos de Videojet, el Distrito Federal, Guadalajara, Monterrey y Querétaro, son las principales ciudades donde se registra el mayor consumo de equipo de codificación y tintas pirata, los cuales son manufacturados en México y Asia, principalmente.
Utilizar consumibles apócrifos a la larga repercutirá negativamente en las finanzas de la empresa, que tendrá que invertir en mantenimientos prematuros para las máquinas, lo cual implica la compra de refacciones y pagar mano de obra (asesores o técnicos), e incluso, en el reemplazo temprano de los equipos, cuyo costo mínimo en el mercado asciende a 10,000 dólares, según datos de la empresa Dominio.
De acuerdo con esta empresa, los consumibles 'pirata' no solo dañan la máquina, sino que también disminuyen la calidad en la impresión de los marcajes en producto terminado, lo cual puede ocasionar que los clientes, regresen la mercancía por fechas de caducidad ilegibles, por ejemplo.
