A partir del primero de marzo entrará en vigor el programa “Primer Empleo”, proyecto basado en la creación de nuevas vacantes para jóvenes egresados de carreras técnicas o nivel licenciatura cuyo fin es mejorar el aparato productivo nacional.
Es una iniciativa planteada desde la campaña presidencial de Felipe Calderón, con el objetivo de objetivo disminuir la taza de desempleo en el país, así como otorgar un incentivo a todas aquellas empresas que decidan participar. Por ejemplo, por cada nuevo puesto una compañía puede llegar a la exención de la cuota patronal del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) hasta 100%.
Humberto Bañuelos, jefe de proyecto de encuestas y remuneraciones de la Cámara Americana de Comercio en México, señaló que este programa beneficia al sector industrial en la reducción estadística de rotación de personal, ya que representa una oportunidad para estudiantes sin experiencia laboral: “Los jóvenes tienen mayores deseos de aprender y, por lo tanto, mayor capacidad de retención y compromiso, lo que permite desarrollar trabajadores con un perfil específico para puestos específicos”, dijo.
En el artículo 8, del programa Primer Empleo, se señala que, para obtener el apoyo del gobierno mexicano mediante el subsidio de la cuota obrero patronal del IMSS, la empresa debe inscribir a los trabajadores ante la dependencia y dar aviso de que se trata de un trabajador adicional o de nuevo registro, contratado por un tiempo mínimo de 21 meses.
Aunque para Bañuelos este programa es una buena manera de comenzar el sexenio, consideró que la industria del país puede enfrentarse a la escasez de profesionistas especializados: “Actualmente en la comunidad estudiantil existen pocos especialistas en robótica, tecnologías de la información, programación de software, etcétera, por ello, es importante que los jóvenes y las empresas tengan un acercamiento para que conozcan la forma en cómo se trabaja al interior de una planta o bien, que puedan empezar a adquirir experiencia".