¿Filtrarías información de tu empresa?
Uno de los principales problemas a los que se enfrentan los empresarios es al robo de información.
Desde una simple base de datos hasta contenido más confidencial, la difusión de datos -por parte del empleado- pondría en gran riesgo a la organización.
En México, los empleados no hacen esta actividad, principalmente, por temor a ser atrapados, así lo confirmó el 50% de un universo aproximado de 300 personas entrevistadas por Monster.com.
El portal, a su vez, sondeó sobre este tema a más de 2,000 usuarios en los 52 países donde tiene presencia, y los resultados arrojan que un 8% reconoció haber revelado secretos de la compañía por dinero; 35% no estaría muy preocupado de que lo atraparan, y 40% refirió que la organización donde labora no es tan interesante para realizar este acto.
La pérdida o fuga de información, sin embargo, es un mal que ataca a las firmas en un alto porcentaje; 8 de cada 10 son víctimas de esta actividad, de acuerdo con un estudio realizado por el Instituto Ponemon (especialista en investigación sobre seguridad informativa), entre más de 2,000 profesionales de TI de diversos países, y patrocinado por la firma de software Check Point.
El análisis detectó que uno de cada cinco correos electrónicos que salen del Internet corporativo, contiene información que supone un riesgo legal, financiero o de cumplimiento para la compañía.
La principal causa de la fuga de datos es la pérdida o robo de equipos, seguida de ataques de red, amenazas en los dispositivos móviles, aplicaciones compartidas y el envío de mensajes de correo electrónico por parte del empleado.
En el reporte "Comprendiendo la complejidad de la seguridad en ambientes de TI", Ponemon evidencia que 49% de las firmas entrevistadas consideran que sus empleados tienen poca o ninguna conciencia sobre la seguridad de los datos, o pasan por alto las normas establecidas para evitar cualquier tipo de fuga.
Para las empresas, las mexicanas al menos, el que un colaborador pudiera poner en riesgo su seguridad al revelar información confidencial, no pasa inadvertido porque el problema produce pérdidas hasta por 500 millones de dólares al año, según un estudio de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial.
En el espionaje corporativo o venta de información suele estar involucrado personal de la compañía en el 80% de los casos. Por ejemplo, en un 15% la fuente de donde salieron los datos es alta gerencial, y en el 54% está de por medio personal operativo, indica la investigación elaborada por la empresa de seguridad.
Datos de la empresa Trend Micro Incorporated señalan que en 6 de cada 10 casos, el empleado utiliza un puerto USB para sacar datos importantes de la compañía; 3 de cada 10 lo hace desde su cuenta de correo electrónico, y otro método común es imprimir la información.
"El método varía dependiendo del nivel de conocimiento técnico de la persona, aunque generalmente, las fugas se dan a través del correo electrónico o de los programas de mensajería instantánea", refieren análisis de esa firma tecnológica.
Cuando un colaborador incurre en este acto, "olvídate de la credibilidad que pierden en las empresas al ser descubierto, lo grave es que se trata de un delito por el cual te pueden someter a acciones legales". Por eso en México, un 50% estaría preocupado por estar inmiscuido en estos temas, comenta Arturo Rosales, director de marketing de Monster.com.
En el país, dice Rosales, pareciera que los empleados tienen "un nivel de moralidad" más alto con relación a lo que se observa con los usuarios de otras latitudes, pues sólo 12% de los entrevistados mexicanos cometería este hecho si le llegan al precio justo, mientras que a nivel global esa cifra es de un 17%.