IPN trata enfermedades con técnica china
Especialistas de la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía (ENMH) del Instituto Politécnico Nacional (IPN) son los primeros en el país en trabajar la técnica china de implantar hilos catgut (de suturas quirúrgicas) para tratar padecimientos como diabetes mellitus, gastritis, colitis y asma. El procedimiento se recomienda para enfermedades de largo tratamiento (crónicas) o que ya no responden a terapias médicas convencionales. La técnica consiste en introducir a nivel subdérmico (debajo de la piel) fragmentos pequeños (1.5 a 2.5 centímetros de largo) de hilo quirúrgico biodegradable e hipoalergénico, tipo catgut (tripa de gato). Éstos se colocan en puntos específicos utilizados en la acupuntura, según la región anatómica del problema, explica Francisco Lozano Rodríguez, especialista en acupuntura del IPN.
Para el implante, explica, se utiliza una aguja hipodérmica (hueca) convencional o un trocar, como los empleados para poner anestesia. Ahí se introduce el pedazo de hilo, que al atravesar la piel y llegar a la profundidad deseada se deja por 21 días, lapso promedio que tarda el material en absorberse. En ese tiempo también se estimula (en forma prolongada) los puntos estratégicos (acupuntos) que favorecen una adecuada comunicación biológica, es decir, se trabaja sobre áreas que ayudan a estimular las habilidades de curación natural del cuerpo y a disminuir el dolor.
Desde 1979, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce la acupuntura como tratamiento eficaz para más de 40 enfermedades, y se considera como una medicina complementaria para erradicar problemas crónicos, entre éstos artritis y malestares gastrointestinales, cita un artículo publicado en la revista Annals of Internal Medicine (Anales de Medicina Interna).
Juan Manuel Hernández, también integrante del equipo de especialistas en acupuntura del IPN, señala que la implantación de los hilos se recomienda en casos de úlceras gástrica y duodenal, gastritis, hernia hiatal, colitis crónica, colon irritable, estreñimiento habitual, diarrea crónica, obesidad e hipertensión arterial, entre otros padecimientos.
Por lo general se colocan entre 8 y 15 hilos, aunque la cantidad depende de la enfermedad a tratar, explica Lozano Rodríguez. Para el médico, una de las ventajas de esta técnica es que el material permanece en el cuerpo esas tres semanas, manteniendo una acción constante sobre el órgano y el problema que se busca mejorar.
Otro beneficio, agrega, es la posibilidad de seleccionar y tratar un menor número de puntos, a diferencia de lo que sucede con la acupuntura tradicional, esto es, en lugar de colocar 20 agujas se podrían aplicar sólo entre ocho y 10 hilos.
Martínez Hernández afirma que el implante no genera efectos adversos a la salud. "Es una técnica muy segura, las únicas reacciones son una pequeña inflamación local, dolor leve y sensación de pesadez, cuando se aplica en extremidades". Las molestias disminuyen en unos días y es un procedimiento rápido: la sesión dura alrededor de 30 minutos.
El médico politécnico subraya que la mejoría se comienza a apreciar desde la primera sesión. Al inicio el tratamiento se aplica cada tres semanas, con una a tres sesiones, y en un lapso de dos meses se debe observar una respuesta favorable. Según la enfermedad es el tiempo que la persona necesita someterse al procedimiento.
El doctor Lozano menciona que, adicional al catgut, hay hilos de otros materiales biodegradables, desarrollados en las últimas décadas y que tardan hasta 60 días en reabsorberse. La clínica de Acupuntura del IPN podría empezar con su aplicación en algunos casos.
Actualmente esta técnica es poco conocida en México, pero en China goza de gran reconocimiento, incluso, ahí se comercializan paquetes personales para su aplicación. Las personas interesadas en la aplicación de este tratamiento pueden acudir a la Escuela Nacional de Medicina y Homeopatía del IPN.