Cómo lograr tus metas laborales en 2014
La típica lista de deseos para cierre de año incluye dejar de fumar, bajar de peso, o pasar más tiempo con la familia. Pero los mexicanos no olvidan el trabajo, seis de cada 10 reconoció que su principal propósito este 2014 es mejorar su empleo, según una encuesta de la empresa Consulta Mitofsky
El número de mexicanos que anhela un trabajo o cambiar el que tiene incrementó dos puntos respecto al sondeo que la agencia de investigación de mercados y de opinión pública realizó el año pasado. Lo segundo más deseado es mejorar el aspecto físico, específicamente bajar de peso y hacer ejercicio.
Los hombres son los más interesados en encontrar un empleo mejor remunerado, así lo estableció 6.4% de los participantes en la encuesta de Mitofsky a mil personas, a diferencia de 3.5% de las mujeres. El principal objetivo de ellas es ganar calidad de vida en el trabajo.
El comienzo de año es un momento propicio para plantear movimientos laborales , no sólo porque las empresas abren su presupuesto sino porque el empleado, en muchos casos, recibe su evaluación de desempeño y puede tener claro qué debilidades trabajar y qué fortalezas potenciar.
"Separarse de la idea del trabajo perfecto es lo primero en que debe trabajarse cuando se planean cambios en lo laboral, y siempre hay espacio para mejorar como profesional, no todo es responsabilidad de las organizaciones", mencionó la psicóloga y especialista en reclutamiento de personal, Elsa Patricia Noriega.
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Un error común que debe evitarse es no analizar el avance en las metas pues así no se detectan los desvíos respecto a lo planeado. "Eso ayuda a poner medidas correctoras o mejoraras para alcanzar un resultado", explicó María Luz García, directora de la firma de recursos humanos Adams Capacitación.
El informe 'Balance Profesional para definir Metas de Carrera' elaborado por Adams establece recomendaciones para mejorar el desempeño profesional y ampliar así las posibilidades de ascender o ser contratado:
1. Sé claro en tus deseos Ubica metas a corto y largo plazo para tener una visión general de dónde estás parado, es decir, con qué cuentas y a dónde quieres llegar el próximo año y qué te hace falta para ello.
2. Organiza la carga de trabajo El trabajo acumulado abruma y bloquea. Si bien en las oficinas hay una tendencia a hacer más de lo que se tiene asignado, hay que hacer un espacio para organizar pendientes y priorizar. Eso ayuda a ubicar lo importante y dejar al final los temas que pueden esperar a ser resueltos o para los cuales debes pedir soporte. Si no realizas un ejercicio de clasificación puedes perder tiempo en cumplir 'bomberazos' mientras lo relevante se queda de lado.
3. ¿Y la red de contactos? En las organizaciones suele valorarse a quienes están dispuestos a apoyar a otros, o al menos llevarse bien con ellos, y no al solitario que nadie apoyaría en caso de ser promovido. La persona con actitud de integración es mejor calificada, cita Adams en su informe. Interrelacionarse con los compañeros y fortalecer la red de contactos ayuda a ampliar las oportunidades de colocarse laboralmente.
4. Busca capacitarte Aunque la carga de trabajo no te permite a veces entrenarte en nuevos temas como quisieras, una meta para el próximo año es analizar en qué temas te conviene ampliar tu formación y cómo lo harás. Esta tarea-señalaron los especialistas en recursos humanos- no debe delegarse sólo a tu superior. "Después de todo, quién es el interesado en avanzar y cambiar de trabajo", subrayó Noriega.
5. Anticípate Por qué esperar a que el jefe te diga en dónde puedes mejorar o qué nuevos proyectos hay para tu área. Tener iniciativa puede colocarte en la mira de los tomadores de decisiones para transferirte de área, lograr una promoción o llevarte a nuevos planes de trabajo.
6. Busca un mentor No está de más tener una figura de apoyo, dentro o fuera de la oficina, que te oriente sobre tus fortalezas y debilidades, y cómo trabajarlas para avanzar. El mentor puede ser un superior de otra área, un ex compañero o jefe de trabajo, lo relevante es que te inspire respeto y deseo de aprender. Si no puedes elegir un entrenamiento de coaching formal, puedes ocupar una comida casual para plantearle a la otra persona tus nuevos intereses y pedir consejos.
7. Mejora tu comunicación Uno de los errores más comunes entre directivos y empleados, en general, es tener miedo a plantear las situaciones que les provocan ansiedad laboral, por miedo a perder el trabajo o ser criticado. Debe hacerse con asertividad, invertir tiempo en planear cómo y qué decir, señaló Noriega. "El miedo a confrontarse es angustiante, pero al hacerlo se reduce el estrés, y disminuye esa sensación de ser un empleado incomprendido", mencionó la psicóloga.
8. ¿Preparado para el cambio? Si nunca lo has hecho, este puede ser el momento de planear hacía dónde quieres mover tu carrera. El terreno laboral está en permanente cambio y debes aprovechar esas variaciones en tu beneficio. El que se adapta sobrevive, el que trata de permanecer anclado a los problemas con su jefe o siente aversión al cambio, está destinado al fracaso, mencionó Patricia Noriega.