Las ‘bóvedas’ más extrañas para ahorrar
Mientras muchos estadounidenses pierden sus ahorros en el mercado de valores, otros esconden el dinero donde saben que no lo perderán.
Los escondites son sorprendentes. El cargador de una pistola, una caja de tampones, la barriga de un oso de peluche...
Kerrie Hopkins le obsequió a su ahorradora tía una caja fuerte en forma de lechuga, que tiene un compartimento secreto. "Nadie sospecharía que es otra cosa que un vegetal", dijo Hopkins a CNNMoney.
Pero cuando su tía vio un anuncio en una revista que promocionaba esa misma caja con apariencia de lechuga, se deshizo de ella, segura de que su escondite ya no era seguro si alguien entraba a su casa a robar.
Kate McDonald guarda su dinero en un sobre. Cuando le mete dinero, dobla el sobre, lo envuelve en papel aluminio y lo guarda en el refrigerador. "Le da un nuevo sentido al término ‘dinero fresco'", comenta.
Cada vez más personas almacenan sus activos tangibles como efectivo y oro, pero necesitan un lugar seguro para ocultarlo.
La semana pasada, el sitio de finanzas personales Mint.com preguntó a sus usuarios cuáles eran los sitios más inusuales para esconder su dinero. Las respuestas iban desde la funda de un iPhone, la parte trasera de un estéreo, una caja de galletas o una bolsa de mano que no se usa. Hay quien lo esconde en el marco de la puerta o en una caja de waffles.
Lo que es seguro, es que los acumuladores de dinero ya no usan el tradicional escondite: su colchón.
Una persona ocultaba su dinero entre las tablas de madera de la base de la cama, otra lo escondía dentro de medias de nylon metidas en el fondo de un cajón.
Otro acumulador explicaba: "colocamos un detector de humo en el techo de la cocina, le quitamos todo el interior y allí metimos el dinero. Un lugar perfecto, accesible para nosotros. No creo que un ladrón revise los detectores de humo".
Algunos más bromistas dijeron que el mejor lugar para esconder el dinero es la Bolsa de valores. " Es tan buen escondite que ya no puedo encontrarlo ", dijo alguien.
Los planes de jubilación también estaban en la lista. Y algunas personas incluso dijeron que ya les gustaría tener dinero para esconder. ¡Qué dolor!
Desde luego, esconder efectivo en nuestras casas puede ser arriesgado, indica David Hefty, presidente de la firma de planeación financiera Hefty Wealth Partners. No sólo te arriesgas a que sea robado, además no obtienes ningún beneficio financiero, mientras que las cuentas de ahorro al menos dan algo de intereses.
"Es la típica reacción de pelear o huir. Estas personas son muy temerosas y ahora mismo desconfían de nuestro sistema financiero", explica Hefty. Así que quizá necesiten trabajar con alguien para superar sus fobias financieras y desarrollar una estrategia real para ahorrar su dinero, agrega.
"Lo que tenemos aquí son personas con una fuerte memoria a corto plazo. Quienes necesitan esconder dinero en efectivo tienen lo que llamamos ‘parálisis financiera'. Están viendo señales de otra recesión", señala.