¿Ya es hora de cuidar a tus papás?
No importa si eres casado, soltero o divorciado, ni si trabajas fuera o dentro de casa: si tus papás ya son adultos mayores y comienzan a tener dificultades para cuidar de sí mismos probablemente comenzarán a necesitar de tu apoyo.
A partir de los 75 años de edad las personas enfrentan diversos eventos que merman sus ahorros como la falta de oportunidades en el campo laboral y la aparición de enfermedades crónicas.
"El gasto es variable. Para quien cuenta con seguridad social no hay problema, y para quienes no, el Seguro Popular ha sido muy exitoso, junto con los programas locales y federales de apoyo al adulto mayor", explica el geriatra Gustavo Loreto en un artículo publicado por la revista Dinero Inteligente de junio 2012.
Según Loreto, director de gerontología de Vive+, empresa de servicios para adultos mayores, las personas a esa edad necesitan medicamentos, análisis y consultas médicas para mantenerse sanos y activos, lo que implica que es muy importante cuidar bien el bolsillo.
Ante estos gastos de salud y asistencia es necesario que los familiares preparen una estrategia. De acuerdo con el especialista, para reducir el gasto en medicamentos se puede recurrir a la compra de algunos genéricos.
En 2012, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) anunció la liberación de las patentes de medicamentos para diabetes tipo 2 (no insulinodependiente), colesterol alto, insuficiencia cardiaca, osteoporosis y tumores cancerosos.
Para los padres que necesitan de asistencia más puntual , Loreto opina que si tienen más de 80 años o comienzan a sufrir depresión, inmovilismo, osteoporosis, trastornos nutricionales, demencia o deterioros cognitivos, no es bueno que vivan solos ya que se pueden deprimir y correr peligro.
El especialista propone tres alternativas para que las necesidades que comienzan a tener los adultos mayores no incida de manera negativa en las finanzas familiares.
La primera es pagar servicios de entrada por salida a alguien; la segunda, que un pariente se dedique a atenderlo; o bien, optar por una casa de retiro.
"Muchos adultos mayores pueden pagarse su propia casa de retiro , pero son los hijos quienes se rebelan ante la idea. La peor opción es que un familiar, casi siempre una mujer, deje su carrera profesional para cuidar al anciano", afirma Loreto.
En México hay muchas casas de retiro, de costo variable. "Depende del presupuesto de cada quien y del tipo de servicio que desee", señala el experto.
Sin embargo, la tendencia en geriatría es optar por residencias que cuiden del adulto únicamente durante el día. De esta forma, el progenitor podrá vivir entre los dos mundos y así no deprimirse.
La revista de finanzas personales Dinero Inteligente, advierte de cuidar que no sea una simple guardería para adultos, sino un centro donde el anciano esté acompañado , reciba sus alimentos, tome sus medicamentos y tenga un programa de actividades, a su gusto, tanto lúdico como rehabilitatorio o de mantenimiento.
