Cómo detectar si eres víctima de violencia financiera
Hace dos años que el esposo de Patricia es desempleado, pero no le importa. Ella se hace cargo de los gastos del hogar y de Jesús, su hijo de 9 años. Lava y plancha ajeno, mientras su marido controla los ingresos y no permite que ella sepa en qué se gasta el dinero.
Patricia es víctima de violencia económica, pero también responsable de fomentarla y tolerarla.
“La violencia es la acción de dañar, lastimar, maltratar o destruir a una persona o comunidad. En la violencia económica, el instrumento de poder que se utiliza para maltratar o manipular al otro es el dinero”, explicó el psicoterapeuta y catedrático de la Ibero, Jesús Piña.
En México, el 56.4% de los hogares en el país ha vivido violencia económica, según las últimas cifras publicadas por el INEGI en la encuesta sobre Dinámicas de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH) 2011.
A nivel nacional, 36% de las mujeres manifestaron haber recibido reclamos por la forma en cómo gastan el dinero, a 24.8% su pareja le prohibió trabajar o estudiar y 21.9% señaló que aunque sus cónyuges tengan dinero han sido tacaños con los gastos de la casa.
Este tipo de agresiones no sólo ocurre hacia mujeres, sino también contra personas de la tercera edad, agregó la presidenta del Instituto Nacional de Madres Profesionistas (INAMAP), Lorena Rubio.
Las conductas de maltrato financiero suceden cuando existe un daño emocional previo que afectó el autoestima de la víctima, agregó la experta en finanzas personales Ana Cortés.
En la relación victima-victimario, pareciera que el papel activo de maltrato lo tiene quien posee el dinero , pero la víctima pide y permite ser agredida porque hay una relación de dependencia económica o de intercambio de amor y aceptación por dinero, agregó Piña.
El maltrato financiero es una conducta fomentada por valores, ideas, costumbres y hábitos del pasado en las cuales la mujer se consideraba “el sexo débil”, quien debería quedarse a cargo de los hijos y el hogar, manteniendo una conducta sumisa, explicó Rubio.
Para salir de este círculo vicioso, la única alternativa es que la víctima deje de lado el rol de “mártir” y gane su propio dinero con su trabajo, coincidieron expertos.
Si eres parte de este círculo vicioso, pregúntate esto y actúa
1.- ¿Cuál es tu relación con el dinero?
Jesús Piña remienda hacer una introspección para determinar si generas tus propios ingresos o dependes de alguien más.
2.- ¿El dinero te genera problemas?
Si discutes con tu pareja porque no alcanza el dinero, porque no te da lo suficiente para pagar la manutención de tus hijos, te condiciona y controla todo lo que puedes gastar, es un foco rojo.
3.- ¿Peleas recurrentemente por el dinero?
A veces por la falta de dinero hay crisis familiares esporádicas. El problema, dice Ana Cortes, es cuando se vuelven constantes y llegan a convertirse en violencia física.
4.- ¿No hay comunicación entre tu pareja y tú?
Es probable que además de negarte dinero o condicionarte sobre su uso, el victimario te oculte de donde lo obtiene, cuánto recibe y en qué lo gasta, detalló Rubio.
5.- ¿Qué responsabilidad tienes en el conflicto?
En esta situación, la víctima y victimario comparten la responsabilidad. Jesús Piña recomienda que te preguntes en qué has contribuido para ocasionar el maltrato y lo aceptes sin justificarte.
6.- Encuentra un empleo formal
Comienza por buscar un empleo fijo que te permita obtener los ingresos mínimos para mantenerte a ti y a tus hijos (en caso de que los haya). “Emprender en esta fase tiene el riesgo de que fracases y regreses con aquella persona que te maltrató pensando que necesitas su apoyo”, dijo Ana Cortés.
7.- Busca un mentor
Rodéate de gente positiva. Entre ellos puede haber un hombre o mujer que haya pasado por lo mismo que tu y pueda acompañarte en el proceso de recuperación, dijo Ana Cortés.
“En EU cuando hay un divorcio, la calidad de vida del hombre cae 10% y la de la mujer 70%. En México el efecto se multiplica”, agregó la experta.
8.- Emprende cuando estés lista
El INAMAP ofrece talleres semanales de 3 horas durante 6 semanas en los que buscan empoderar a la mujer, trabajar en la reconstrucción de su autoestima y vincularlas con empresas que ofrezcan horarios flexibles y medias jornadas para lograr su independencia financiera. Además ofrece cursos de incubación de empresas si tienen un proyecto en mente. Los talleres son gratuitos.
