Perú decreta emergencia en zona en la que secuestraron a 43 trabajadores
El gobierno peruano declaró este martes en Estado de emergencia el distrito donde se reportó el secuestro de decenas de trabajadores de un complejo gasífero.
El estado de emergencia entró en vigor a partir del 11 de abril, y durará 60 días en el distrito de Echarate, de la provincia de La Convención, informó en su sitio de internet el diario oficial El Peruano .
La medida fue tomada por el gobierno después del secuestro de trabajadores de la empresa de construcción Skansa realizado el pasado lunes por militantes de Sendero Luminoso.
Según el decreto, en el secuestro participaron unos “50 elementos terroristas”.
“Tales hechos que son de conocimiento público, demandan una acción inmediata del Estado a efectos de proteger a la población del referido distrito", indicó el decreto publicado en la gaceta oficial.
Voceros del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional, consultados por CNNMéxico, se negaron a ofrecer mayores detalles sobre el operativo realizado por las fuerzas del orden en el área, “por lo delicado del tema”, argumentaron.
El Ministerio del Interior informó que, en total, son 43 personas las que permanecen secuestradas, reportó la agencia EFE.
"Inicialmente fueron 45 los secuestrados y los únicos liberados han sido una doctora y una enfermera que no podían avanzar por la selva. A ellas se les ha entregado las notas con las reclamaciones", afirmó una fuente del ministerio, según EFE.
Según medios locales, los secuestradores piden el pago de 10 millones de dólares para liberar a los trabajadores y una "cuota de guerra" anual de 1.2 millones de dólares.
La privación ilegal de la libertad de los trabajadores ocurrió en la zona del valle de los ríos Apurímac y Ene, un lugar selvático de difícil acceso donde operan los remanentes de la banda armada Sendero Luminoso y mafias del narcotráfico.
Sendero Luminoso es un grupo maoísta que fue fundado en 1980. El grupo secuestró a 70 empleados de una empresa petrolera en 2003, los cuales fueron liberados días después.
Durante años de ataques insurgentes y enfrentamientos murieron unas 70,000 personas. Aunque el grupo fue debilitado con la captura en 1992 de su líder Abimael Guzmán, aún hay grupos que operan en regiones remotas del país.