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Ocho personas son detenidas por el derrumbe del edificio en Bangladesh

Entre los detenidos están dos de los propietarios de la fábrica, mientras que la cifra de muertos aumentó a 334 personas
sáb 27 abril 2013 09:42 AM

Las autoridades de Bangladesh arrestaron a ocho personas, dos de ellas son los dueños de la fábrica que se derrumbó esta semana cerca de la capital Dacca, lo que provocó la muerte a 334 personas y dejó a otras más bajo los escombros.

También fueron detenidos varios familiares de los propietarios y dos ingenieros, informó la estatal agencia de noticias Bangladesh Sangbad Sangstha.

En medio de las detenciones, el número de muertos se ha incrementado mientras que las familias de los desaparecidos esperaban un milagro, y este llegó.

Los equipos de rescate ayudaron a salir a una mujer que había dado a luz en medio de los restos del edificio de ocho pisos que se derrumbó, informó la agencia estatal.

Un día después del rescate, no estaba claro hasta este sábado la condición de la madre y el bebé. Pero la mayoría de los informes procedentes de la estructura desplomada eran de dolor.

Los funcionarios encargados de la coordinación de la operación notificaron que los esfuerzos de rescate terminarían este sábado por la mañana. Utilizan maquinaria pesada para recuperar los cuerpos restantes entre los escombros.

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Este anuncio provocó protestas de los familiares de los desaparecidos, muchos de ellos mostraban fotografías de sus parientes que aún no han sido localizados.

La policía utilizó gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, informó Bangladesh Sangbad Sangstha.

Las protestas continuaron este sábado con multitudes que salieron a las calles en cuatro distritos de Dacca.

En un hospital universitario cercano a la zona del desastre, “miles de sobrevivientes han sido atendidos”.

“La crisis de la sangre es grave y las autoridades del hospital están llamando a la gente para que acuda a donar para atender a las víctimas. También hay una escasez de medicamentos. El hospital militar local también está tratando a los sobrevivientes”, afirmó Sajjad Hussenin, vocero de la agencia anticorrupción.

Buscando a sus seres queridos

La imagen de la desesperación era evidente este viernes en una escuela cercana, donde se ha resguardado los cuerpos. Cientos se abalanzaron, muchos de ellos familiares, buscando desesperadamente a sus seres queridos.

"La gente con fotos de sus familiares, en su mayoría trabajadores de las fábrica de ropa, están pidiendo ayuda a los funcionarios. Siempre que una ambulancia llega al lugar, todo el mundo se precipita con la esperanza de encontrar al menos el cuerpo de sus seres cercanos y queridos", dijo Hussein.

En total, más de 2,300 personas han sido rescatadas, dijo la policía.

Sin embargo, puede tomar tiempo hasta que se conozca la magnitud de la destrucción. La noche de este viernes, los familiares informaron que 595 personas siguen desaparecidas, dijo la policía.

Grietas aparecieron un día antes

El derrumbe se produjo la mañana de este miércoles , un día después de que aparecieron grietas en la estructura. Esto ha provocado indignación en Bangladesh sobre las laxas normas de seguridad en la industria textil que es clave para el país.

La mayoría de las víctimas parecen haber sido trabajadores de la fábrica de prendas, a los que se les pidió acudir a trabajar a pesar de sus preocupaciones de que la estructura del edificio no era sólida.

Las grietas llevaron a que un banco pidiera a sus empleados que no se presentaran a trabajar este miércoles, y las tiendas en el centro comercial fueron cerradas debido a una huelga.

Los fabricantes de ropa de Bangladesh y la Asociación de Exportadores anunciaron este viernes que todas las fábricas de ropa se cerrarán este fin de semana "por el tratamiento de las víctimas del derrumbe de un edificio en Savar y la finalización de la operación de rescate con éxito".

La primera ministra, Sheikh Hasina, ordenó este viernes a la policía detener a los dueños del edificio y las fábricas para que puedan "afrontar acciones legales", dijo su vocero.

"No es un accidente, es un incidente de muerte", dijo el ministro de Información, Hasanul Inu Haq, a los periodistas. "Todos, incluidos los propietarios y los funcionarios administrativos en cuestión se debe poner bajo investigación por la muerte de las personas".

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