Una menor afgana afirma que fue obligada a ser una bombardera suicida
Una niña afgana de 10 años asegura que fue presionada para llevar a cabo un ataque suicida contra una estación de policía en la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, informaron autoridades.
Sin embargo, el complot del ataque fue desmantelado, aunque hubo informes contradictorios sobre los detalles. Pero el hecho de que la menor quedara atrapada en el episodio fue suficiente para que el presidente Hamid Karzai condenara inmediatamente a los presuntos atacantes.
“Los niños, los creadores del futuro de nuestro país, deberían ser cuidados y deberían ser provistas oportunidades de educación para ellos”, dijo en un comunicado. “No deberían ser usados como herramientas para ataques suicidas”.
Las fuerzas afganas e internacionales han arrestado a muchos potenciales niños atacantes previamente.
El año pasado, la policía afgana interceptó a 41 niños a quienes los rebeldes planeaban usar como bombarderos suicidas. Los menores tenían entre 6 y 11 años.
Según Karzai, la niña identificada como Spozhmai fue obligada a realizar el atentado suicida y ahora se encuentra bajo la protección del gobierno.
El hermano de la menor, Zahir, es conocido localmente como Hameed Sahib y es un comandante talibán local, informó el Ministerio del Interior.
Después de ser puesta bajo custodia, la menor fue presentada a reporteros.
“Mi hermano Zahir y su amigo Jabar me obligaron a usar un chaleco suicida (con explosivos)”, dijo Spozhmai a los reporteros.
Explicó que cruzaron un río y llegaron a la estación de policía, localizada en el pueblo de Khanishin, según funcionarios de gobierno. Pero el agua estaba demasiado fría y la menor gritó que no podía cruzarlo, según relató.
“Me regresaron a casa y (quitaron) el abrigo de mi cuerpo. Mi padre me golpeó. Tuve que huir de casa en medio de la noche y pasar el resto de la noche en un pueblo cercano a nuestro hogar”, dijo.
La menor se presentó ante la policía al día siguiente, dijo.
Cuando fue puesta bajo custodia, la menor no portaba explosivos, dijo el vocero del gobierno de la provincia de Helmand, Umar Zwak, a CNN después de revisar el reporte de la investigación inicial.
Los explosivos aun no han sido recuperados y las autoridades continúan investigando las declaraciones de la menor. Zwak dijo que las autoridades no confían del todo en lo que la niña dijo.
El funcionario entregó a CNN un resumen de lo que Spozhmai dijo a la policía, lo cual resultó ser ligeramente distinto a la versión dada a la prensa.
La menor dijo a la policía que fue abandonada en el río con una advertencia: “Si regresas viva, te mataremos”.
La menor luego añadió que cruzó el río, se quitó los explosivos del cuerpo y empezó a gritar, dijo el vocero. Debido a que nadie la escuchó, se refugió en un edificio abandonado y se presentó luego ante la policía en la estación que supuestamente debía atacar, añadió.
Karzai dijo que ordenó al Ministerio del Interior que regresara eventualmente a Spozhmai con sus padres, después de comprobar que la menor sería capaz de continuar su vida familiar normalmente.
