Previo a reunión de Putin y Poroshenko, Ucrania detiene a soldados rusos

Diez soldados rusos fueron detenidos en la región de Donetsk, en el este de Ucrania, dijo este martes el Servicio de Seguridad de ese país, en medio de las tensiones por el conflicto entre las fuerzas ucranianas y los rebeldes prorrusos.

Los soldados rusos fueron capturados y tenían documentos y armas, dijo el Servicio de Seguridad.

Rusia ha negado en repetidas ocasiones los reclamos de Kiev de que ha enviado tropas y armas hacia la frontera con Ucrania, donde los militares ucranianos están luchando contra los rebeldes prorrusos.

La agencia de noticias estatal de Rusia RIA Novosti citó a una fuente del Ministerio de Defensa de Rusia diciendo que los soldados habían estado patrullando la frontera y "muy probablemente cruzaron por accidente" en un punto no marcado.

El hecho se da cuando el presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, y su homólogo ruso, Vladimir Putin, se reúnen por primera vez desde junio.

Los dos líderes se encuentran en Minsk, capital de Bielorrusia, para sostener conversaciones comerciales relacionadas con la Unión Aduanera de Eurasia, un bloque comercial integrado por Rusia, Bielorrusia y Kazajstán.

Altos funcionarios de la Unión Europea (UE), encabezados por el jefe de Política Exterior de la UE, Catherine Ashton, también se encuentran en Minsk para la cumbre.

"La UE asiste a ver si los debates pueden ayudar a crear el impulso para una nueva solución política a la crisis en Ucrania", dijo la portavoz de Ashton, Maja Kocijancic.

Ministro: 'Rusia está dispuesta'

Todavía no se ha confirmado si Putin y Poroshenko, quienes se reunieron brevemente durante la conmemoración del 'Día D' en Francia, sostendrán conversaciones bilaterales en Minsk.

Pero el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, no descartó la posibilidad este lunes, diciendo: "Rusia está dispuesta a participar en el arreglo de las crisis de Ucrania en cualquier formato que pueda conducir a su unidad nacional”.

El actual conflicto se desató primero el año pasado por una crisis política causada por si Ucrania buscaría estrechar los lazos con Europa o con Rusia. El derrocamiento del presidente Viktor Yanukovich en febrero fue seguido por la anexión de Rusia de la región de Crimea de Ucrania en marzo y una declaración de independencia de los líderes separatistas en las regiones de Donetsk y Lugansk.

Poroshenko en junio firmó un destacado pacto comercial de la UE, a pesar de la oposición de Rusia.

El martes, tras reunirse con Ashton, el presidente dijo que Ucrania podría ratificar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea en septiembre e inmediatamente enviar los documentos de ratificación a Bruselas.

La medida "no es de ninguna manera dirigida contra nadie", dijo Poroshenko, según un comunicado de su oficina. "En cambio, el acuerdo afectará positivamente las relaciones con todos nuestros vecinos, especialmente en la esfera económica. Nos gustaría que nuestros socios internacionales aceptaran nuestra decisión”.

Poroshenko también habló con Ashton acerca de la situación en el este de su país, incluyendo la detención de los 10 soldados rusos, según el comunicado.

"Hacemos un llamado al mundo con una petición para apoyar a Ucrania y fomentar el establecimiento de un sistema eficaz de control sobre la frontera con Rusia para evitar la infiltración transfronteriza de armas, equipo militar y de mercenarios", dijo.

"Entonces, el conflicto se resolverá en un tiempo muy corto".

Agregó que las elecciones parlamentarias previstas para el 26 de octubre no deben afectar el acuerdo de la UE. El viaje de Poroshenko a Bielorrusia se produce un día después de que disolvió el parlamento de la nación.

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'Yo solo quiero sobrevivir'

Mientras tanto, continúan los combates por el control de Lugansk y Donetsk, ambos bastiones de los combatientes rebeldes.

La Defensa Nacional de Ucrania y el Consejo de Seguridad, dijo este martes que los militantes y los militares rusos se han vuelto más activos en el este y sur de Donetsk, así como a lo largo de la frontera, con 29 enfrentamientos en los últimos días.

Los combatientes rebeldes siguen cruzando la frontera, respaldada por los disparos del Ejército ruso, dijo el portavoz de NDSC, Col. Andriy Lysenko, a periodistas en una sesión informativa.

Cuatro guardias fronterizos ucranianos murieron y tres resultaron heridos cuando dos helicópteros Russian Mi-24 dispararon contra ellos, dijo.

Rusia niega su participación directa o indirecta en los combates y, a su vez dice que el asalto de Ucrania contra los rebeldes está precipitando una crisis humanitaria.

La ciudad sitiada de Luhansk ha estado sin agua y energía por más de tres semanas, dijeron funcionarios de la ciudad el domingo. El bombardeo ha causado daños importantes allí y en los alrededores de las aldeas las últimas semanas.

Miembros de la familia Mahounin dijeron a CNN cómo huyeron de su ciudad dos días antes. Un intenso bombardeo significó que tuvieron que pasar 24 horas al día en un refugio antibombas subterráneo con más de 100 personas.

"No me importa por lo que están luchando, solo quiero sobrevivir. Quiero que mi hijo sobreviva", dijo Lilia Mahounin.

Convoy de ayuda

Lavrov dijo a los periodistas que Rusia espera enviar un segundo convoy de ayuda humanitaria a Ucrania esta semana para ayudar a los civiles atrapados en el conflicto.

El pasado viernes, un convoy de 227 camiones rusos cruzaron la frontera de ese país en el este de Ucrania sin la autorización de Kiev, un movimiento condenado por las potencias internacionales como una violación de la soberanía de Ucrania. Funcionarios de Kiev se refieren a ella como una invasión.

Los camiones salieron un día más tarde, entregando con éxito los suministros a Luhansk, dijeron las autoridades rusas. Autoridades ucranianas dijeron que sospechaban que la entrega había sido utilizada para reforzar a las fuerzas rebeldes.

El Comité Internacional de la Cruz Roja está luchando para conseguir la ayuda que necesitan desesperadamente los civiles en los pueblos y ciudades sitiadas debido a la inestable situación de seguridad.

"Contamos con 10 camiones llenos de suministros humanitarios que queremos traer, pero hasta ahora, no había posibilidad de llevar por razones de seguridad", dijo un funcionario del CICR, Peter Huber, dijo a CNN.

Funcionarios de la ONU estiman que más de 2,000 personas han muerto y cerca de 5,000 han resultado heridos en el este de Ucrania desde mediados de abril.

La canciller alemana, Angela Merkel, en una visita de fin de semana a Kiev, Ucrania, prometió préstamos por valor de 500 millones de euros para ayudar a reconstruir la infraestructura y viviendas destrozadas.