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Formal prisión a otro presunto implicado en el asesinato de Fernando Martí

Un juez dictó formal prisión a Pablo Solórzano Castro por ser presunto partícipe en el asesinato de Fernando Martí, en 2008
mié 03 agosto 2011 04:07 PM
Alejandro Marti Miranda de Wallace Camara Diputados
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La Procuraduría General de la República (PGR) obtuvo una orden de formal prisión en contra de Pablo Solórzano Castro, El gallo, quien presuntamente habría participado en el asesinato de Fernando Marti , hijo del empresario mexicano Alejandro Martí.

La fiscalía federal informó que la orden de aprehensión se debe a los probables vínculos de El gallo con la banda de secuestradores La Flor , acusada de ser responsable del secuestro y asesinato de Fernando Martí, en junio de 2008.

“Es probable responsable de la comisión de los delitos de delincuencia organizada, privación ilegal de la libertad en modalidad de secuestro y posesión de cartuchos para armas de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea”, detalla la PGR.

El secuestro y posterior asesinato de Fernando Marti, quien apenas tenía 14 años, fue un caso que provocó conmoción en gran parte de México. Hijo del empresario Alejandro Martí, anterior dueño de una cadena de tiendas y clubes deportivos, fue secuestrado el 4 de junio de 2008, y a pesar de que se pagó el rescate a los secuestradores, fue encontrado sin vida en la cajuela de un automóvil el 1 de agosto de ese año en la ciudad de México.

El presunto secuestrador había sido detenido desde el 12 de mayo pasado, y hoy se le dictó auto de formal prisión de acuerdo a una sentencia emitida por el Juzgado de Distrito en Materia de Procesos Penales Federales en el Estado de México.

Solórzano Castro se encuentra en el Centro Federal de Readaptación Social número 1 en el Estado de México, “Altiplano”, la prisión de máxima seguridad del país, donde continuará su proceso legal.

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El 10 de junio pasado, Noé Abraham Soto García, El chimuelo, fue sentenciado a 169 años de prisión por ser el autor confeso del homicidio del joven Martí y su amigo, Antonio Equihua.

El caso de Fernando Martí

Tras la muerte de su hijo, Alejandro Martí emprendió un llamado a la sociedad mexicana exigiendo un “ya basta” que pusiera fin a los secuestros y violencia del país, frase que fue respaldada por un amplio grupo de ciudadanos, organizaciones civiles y políticos.

El caso de la muerte de su hijo convocó a la creación un Consejo de Seguridad Nacional por parte de las autoridades, en cuya reunión inicial, a la que asistieron gobernadores de todos los estados de la República, lanzó un reto: “Si piensan que la vara es muy alta o imposible de hacer, si no pueden, ¡renuncien! Pero no sigan ocupando las oficinas de gobierno, no sigan recibiendo un sueldo por no hacer nada, porque eso también es corrupción”.

Organizaciones civiles convocaron a los ciudadanos a manifestarse en las calles a través de la marcha nacional “Iluminemos México”, a la que asistieron miles de personas en las principales ciudades del país. Martí después creó la fundación México SOS para “poner un alto a la crisis de inseguridad por la que atraviesa nuestro país”.

Promovió al lado de Isabel Miranda de Wallace , madre de otra víctima de secuestro, la creación de una la Ley Antisecuestro, la cual fue discutida y aprobada en la Cámara de Diputados en octubre de 2010, y establece penas mínimas de 50 años de prisión a los plagiarios.

Las investigaciones del caso desde 2008 estuvieron marcadas por dudas en la actuación de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, y la Policía Federal, pues, a pesar de que Noé Abraham Soto García confesó ser el autor material del homicidio tras su captura, la Policía Federal había identificado en 2008 a la banda de Los Petriciolet  como los responsables de los homicidios, y no a la banda de La Flor.

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