Retiro de cruces en honor a víctimas del Casino Royale ofende a familiares
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Nuevo León (CEDH) emitirá este lunes una medida cautelar urgente para que los familiares de las víctimas del incendio en el Casino Royale puedan tener un espacio en el centro de apuestas donde honrar a los fallecidos, informó Minerva Martínez, presidenta del organismo.
La titular de la CEDH y Sámara Pérez, vocera de las 52 familias afectadas ofrecieron una conferencia de prensa luego de que los dueños del terreno del casino retiraron la cruces, mantas y ofrendas en honor a las víctimas instaladas afuera del local en Monterrey, al norte del país.
“Procede una medida cautelar con carácter de urgente ante las autoridades del municipio de Monterrey para que gestionen que se respete el lugar que es sagrado para las víctimas”, dijo Minerva Martínez.
La presidenta de la CEDH destacó que recientemente la Comisión Interamericana de Derechos Humanos emitió una recomendación señalando que “se debe respetar un lugar donde las víctimas tengan un rincón para ir a venerarlas”.
Dijo que el Estado debe garantizar que se respete un espacio para los familiares de las víctimas y que en este caso se gestione ante el dueño del local que se restituyan las cruces que estaba afuera del casino.
Minerva Martínez aseguró que la Comisión Interamericana ha declarado que las empresas también violan los derechos humanos y pueden ser sancionadas.
La vocera de los familiares de las víctimas dijo que solicitó ayuda a la Comisión Estatal de Derechos Humanos para reinstalar las cruces que pusieron en memoria de sus seres queridos.
“Violentamente las quitaron del lugar donde fueron los tristes acontecimientos del 25 de agosto y de una forma deshumanizada nos (las) entregaron por debajo de una barda”, agregó Pérez, quien perdió a su hijo en el atentado.
Mencionó que los familiares de las víctimas se sienten ofendidos por el retiro de las cruces, por lo que acudieron ante la CNDH.
Esta mañana trabajadores que realizan limpieza afuera del local retiraron las cruces que fueron instaladas en la barda perimetral del casino y las colocaron en la banqueta.
Las ofrendas en honor a las víctimas fueron colocadas un día después del atentado que llevó a cabo el grupo delictivo Los Zetas, la tarde del 25 de agosto, debido a que los dueños del casino se negaron a pagar una extorsión, según autoridades.
Esa tarde llegó un grupo de ocho hombres e incendió el local, lo que provocó la muerte de 52 personas, la mayoría por intoxicación.
Después del atentado fueron detenidos alrededor de 20 miembros de Los Zetas que presuntamente participaron en el atentado; dos más murieron en enfrentamientos con el Ejército.