Líderes del PAN buscan "unidad" para concluir la votación de sus estatutos
Líderes del Partido Acción Nacional (PAN) se reunieron este miércoles en un desayuno privado para lograr un acuerdo de "unidad" previo a la Asamblea Nacional Extraordinaria, la cual ha sido suspendida en varias ocasiones por la falta de acuerdos entre los integrantes del partido.
En la reunión encabezada por el presidente del partido, Gustavo Madero, diversos líderes de Acción Nacional discutieron la propuesta de abrir la elección del dirigente nacional del PAN a la ciudadanía, uno de los puntos que ha causado mayor conflicto entre diversas corrientes ideológicas en las asambleas pasadas.
La propuesta "dará mayor fuerza al militante", pues "impulsará una mayor representación al panismo de los estados, además de que se abrirá al ciudadano y mejorará su funcionamiento y competitividad", dijo Madero, de acuerdo con un comunicado del PAN.
Este punto ha sido uno de los que provocó el rompimiento del quórum de la 17 Asamblea Nacional del PAN , en la que no se pudo lograr un consenso entre los más de 9,000 delegados que asistieron a la convocatoria en la Ciudad de México.
Sin embargo, para la reunión de este 10 de agosto Madero aseguró que “se encuentra asegurado el quórum” y así evitar una nueva posposición de la votación.
Al desayuno en la sede del PAN de este miércoles acudieron los coordinadores del partido en el Congreso, la excandidata presidencial Josefina Vázquez Mota , los exprecandidatos Ernesto Cordero y Santiago Creel, así como Luis Felipe Bravo Mena, Germán Martínez y César Nava, los últimos presidentes del partido.
En la Asamblea Nacional de marzo ya se habían aprobado los primeros cambios a los estatutos que incluía nuevos procedimientos para la elección de dirigentes y consejeros estatales, así como nuevas reglas para la afiliación de ciudadanos.
El PAN convocó a esta sesión extraordinaria para intentar una refundación después de la derrota electoral del 1 de julio pasado, en la cual perdió la presidencia de México, que había ocupado durante 12 años.
Como parte de la reestructuración, el PAN depuró su padrón de militantes. Un 80% de los panistas perdieron su militancia por no refrendarla con documentos, lo que llevó al partido a un número de afiliados similar al que tenía antes de alcanzar la presidencia.