México espera la cuantificación de los daños para cobrar su seguro del BM
El gobierno de México tendrá que esperar a terminar la cuantificación de los daños que dejaron Ingrid y Manuel para poder acceder al seguro por evento catastrófico que tiene contratado a través del Banco Mundial.
Este seguro se activa tras cumplir con una serie de condiciones. “La primera condición es que tu evento supere los 350 millones de pesos, después hay un deducible de 750 millones de pesos (anuales) y una vez que superas eso tienes una cobertura de 5,500 millones”, explicó en entrevista Oscar Ishisawa, especialista en administración de riesgo de desastres del Banco Mundial.
Las autoridades federales han dicho que los 12,000 millones de pesos que hay en el Fondo Nacional de Desastres para reconstrucción no serán suficientes para resarcir los daños causados por las tormentas que afectaron el Golfo y el Pacífico de forma simultánea . Los desastres han causado 157 muertes y 60,000 personas evacuadas en 18 estados.
México adquirió en julio pasado el nuevo modelo de póliza contra desastres, que tiene una vigencia de un año, precisó Ishisawa.
Anteriormente, contaba con un esquema contratado por exceso de pérdidas, en donde los eventos tenían que costar más de 12,500 millones de pesos para que se pudiera cobrar.
Con el nuevo esquema, una vez que se supere el monto de 350 millones de pesos y el deducible “se puede empezar a trabajar con las aseguradoras para que se transfieran los montos” cuando ambas condiciones se cumplan, dijo Ishisawa. “Acompaña al gasto del Fonden”.
El especialista en riesgos dijo que México es el único país en la región que ha adquirido seguros catastróficos como prevención, por lo que es pionero en el tema.
“Las primas de tales seguros de catástrofe (los anteriores) no estaban perfectamente bien medidas, porque tenía que gastar el país en un solo fenómeno más de 12,000 millones de pesos para que te dieran el primer peso. Esto implica que México nunca pudo cobrar un solo peso de todas las inversiones que hizo en este nivel de adquisición de bono catastrófico”, explicó el Coordinador Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente el pasado 3 de octubre en una conferencia telefónica.
Puente dijo que este esquema “fue una inversión mal diseñada”, pues complicaba el cobro de los recursos. El funcionario dijo que expuso ante el Banco Mundial, en Ginebra, “que las mediciones con las que contaba el BM para poder determinar el volumen de afectaciones para cobrar el primer dólar, no permitía que en una misma catástrofe se pudiese hacer el cobro de las mismas”.
CNNMéxico buscó de nuevo a Puente para consultarlo sobre los nuevos instrumentos para el cobro de pólizas que expuso Ishisawa, pero no ha obtenido respuesta.
El seguro que no se cobrará
México cuenta con otro seguro, el bono MultiCat contra catástrofes, pero no podrá echar mano de él debido a que los fenómenos Ingrid y Manuel no cumplen con las condiciones predeterminadas por las pólizas relacionadas a su intensidad.
En octubre del año pasado, México emitió un bono catastrófico por 315 millones de dólares –vigente hasta 2015– con el que el país aseguraba contar con una bolsa de recursos si ocurrían fenómenos naturales como sismos o huracanes.
El MultiCat es un tipo de cuenta donde los inversores ponen su dinero, mismo que es manejado por el Banco Mundial, quien actúa como un puente entre los mercados internacionales y México. Si durante la vigencia del bono no se requiere de él, los inversores recuperan el dinero con intereses; si ocurre un desastre, el dinero es desembolsado al país inversor inmediatamente.
Para que el MultiCat 2012 se active ante la presencia de un huracán -ya sea en el Atlántico o en el Pacífico- este debe cumplir ciertas características de fuerza, como tener una presión igual o menor a 920 milibares (mb) lo que lo convierte en categoría cuatro o cinco, según la clasificación Saffir-Simpson; de lo contrario, no puede calificar como un evento cubierto.
“El MultiCat sabrías muy rápido si se activa por las condiciones que están ligadas al fenómeno en sí, en este caso de Ingrid y Manuel no se aplica”, expone Ishisawa. Manuel tocó tierra en Guerrero como tormenta tropical y Sinaloa como huracán categoría uno, al igual que Ingrid.