Comisiones del Senado avalan las leyes energéticas y las envían al pleno

Los cuatro dictámenes con las leyes secundarias de la reforma energética quedaron aprobados este martes en comisiones del Senado mexicano, en una sesión de la que se retiró el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en protesta por el método de discusión acordado por el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) y por el Partido Acción Nacional (PAN).

Con la aprobación, los dictámenes serán enviados a la Mesa Directiva de la Cámara alta para que ésta los someta a debate en el pleno. Para ello, se requiere que la Comisión Permanente del Congreso de la Unión convoque a un periodo extraordinario –pues entre inicios de mayo y de septiembre hay un periodo de receso legislativo–, lo que se prevé ocurra en la sesión de este miércoles.

Los cuatro dictámenes quedaron aprobados por unanimidad –con los votos del PRI, del PAN y del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aliado tradicional del PRI–, menos de dos horas y media después de que los senadores del PRD dejaran el salón.

El PRD, principal partido de la izquierda, exigía que la discusión se postergara 48 horas, argumentando que sus legisladores necesitaban más tiempo para revisar las reservas presentadas a los documentos.

Sin embargo, el PRI y el PAN rechazaron la demanda al señalar que cerca del 80% de las reservas habían sido promovidas por integrantes del propio PRD.

En respuesta, el perredista Zoé Robledo anunció el retiro de su bancada y criticó al priista David Penchyna, presidente de la Comisión de Energía de la Cámara alta, por lo que calificó como un trato irrespetuoso hacia la oposición.

"Nos vemos en el pleno. Ahí estamos convencidos que habrá un ambiente diferente y que habrá la oportunidad de debatir esto de cara a la nación. Por eso estamos convencidos de que este es el peor de los procedimientos que haya tenido el Senado de la República para una reforma tan importante", dijo Robledo antes de abandonar el salón junto con sus compañeros.

Penchyna y el panista Salvador Vega Casillas, secretario de la Comisión de Energía, criticaron la decisión del PRD y señalaron que refleja que su única intención es retrasar el debate.

"Hay quien se pregunta: '¿para qué reforma energética, por qué ahora?' La creación de empleos formales no admite más demora en la economía mexicana, ni se puede condenar al presente inmediato y al plazo mediato a un crecimiento económico meramente inercial", dijo Penchyna.

En diciembre de 2013, cuando se aprobó y promulgó la reforma constitucional en materia energética, el PRD votó en contra porque considera que al abrir el sector a la inversión privada se entregarán los recursos energéticos del país a particulares.

Por el contrario, el PRI y el PAN afirman que el Estado mantendrá rectoría sobre sus bienes y que la reforma es necesaria para impulsar el crecimiento económico.

Los cuatro dictámenes aprobados este martes incluyen cambios a 15 leyes, entre la creación de nuevas y modificaciones a normas vigentes. Al mismo tiempo, comisiones de la Cámara de Diputados discuten las iniciativas que fueron turnadas a San Lázaro como cámara de origen porque implican ajustes en materia fiscal y de ingresos del Estado.

Entre los dictámenes que ya aprobó el Senado se incluyen las nuevas leyes de organismos reguladores del sector, de Petróleos Mexicanos (Pemex) y de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así como de la Industria Eléctrica y de Hidrocarburos.

Dentro de este último dictamen, el PRI aceptó una modificación del PAN para eliminar la posibilidad de que tierras puedan ser expropiadas para la explotación de hidrocarburos. En su lugar, se contempla la figura de "ocupación temporal" de un terreno.

El proyecto de dictamen ya incluía el concepto de "zonas de salvaguarda", que definía como espacios en los que el Estado podría ordenar la limitación de la exploración o la exploración de energéticos; sin embargo, los partidos modificaron la redacción para que el Estado pueda prohibir por completo las actividades energéticas en las referidas zonas protegidas.

La negociación de las leyes secundarias tomó más de dos meses, luego de que el presidente Enrique Peña Nieto enviara sus iniciativas al Congreso a finales de abril pasado. La reforma energética es una de las principales propuestas del mandatario.