Ilustradores retratan los rostros de los 43 normalistas para no olvidarlos
Diversos ilustradores profesionales y dibujantes no profesionales de México, Chile y España, han recreado los rostros de los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa desaparecidos hace más de un mes, con el objetivo de mantenerlos "presentes como humanos y no como cifras".
La iniciativa, que hasta la tarde de este martes había reunido a más de 220 colaboraciones, fue promovida por Valeria Gallo, una ilustradora mexicana independiente.
"Les escribí a tres amigos ilustradores, la primera que respondió fue Margarita Sada, y me devolvió la idea con un maravilloso retrato de Carlos Lorenzo, yo ya trabajaba en mi retrato dedicándolo a Benjamín Ascencio, y el viernes las subimos a Facebook, provocando así la cadena de retratos... El sábado ya teníamos más de 100", dijo Gallo a CNNMéxico.
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Ilustradores como Alejandro Magallanes, Gabriel Pacheco, Margarita Sada, Enrique Torralba, Bef y Mauricio Gómez Morín han aportado sus retratos, aunque también han participado estudiantes y dibujantes no profesionales. "Recibimos también la valiosa aportación de unos pocos ilustradores extranjeros de Chile y España", agregó la ilustradora.
"El objetivo es tenerlos presentes, como seres humanos y no como cifras. Nos da miedo el olvido. Me aterra pensar en acostumbrarme a vivir en medio de todo esto sin siquiera decir algo, sin gritar, sin marchar, sin dibujar", afirmó la también maestra de dibujo en la Escuela de Diseño del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
"Me siento muchas veces impotente ante tanta desaparición, tanta injusticia. No quiero acostumbrarme a esta realidad, no quiero que para mi hijo sea normal escuchar de cuerpos encontrados en fosas, de gente desaparecida, de gente inocente encarcelada", agregó Gallo.
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Los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, desaparecieron el pasado 26 de septiembre tras un ataque de policías locales e integrantes del grupo delictivo de Guerreros Unidos en Iguala, a donde se habían desplazado para recaudar fondos para sus actividades.
Además de evitar el olvido, la iniciativa busca que los mexicanos no consideren estos hechos violentos un acto normal y, de alguna manera, preservar la personalidad de los 43 jóvenes.
"Es como no querer perder la capacidad de asombro, pero en otro sentido. No perder humanidad. Y al retratar a los estudiantes, en este caso específico, les devolvemos su personalidad, dejan de ser sólo un número, un nombre", agregó.