FEMSA denuncia bloqueo en Venezuela
La unidad en Venezuela del fabricante de bebidas mexicano Coca Cola Femsa denunció el lunes un “bloqueo ilegal” de 13 instalaciones por parte de un grupo de ex contratistas, lo que afecta sus operaciones en medio del actual problema de desabastecimiento de alimentos en el país.
La firma dijo que los ex trabajadores cerraron con cadenas y vehículos el acceso a una planta en el occidente del país y 12 centros de distribución a nivel nacional, lo que golpea un tercio de su red comercial y del 43% en su volumen de ventas.
“Se ha producido la toma ilegal y arbitraria de 13 de nuestros centros de trabajo”, explicó a Reuters el director de Asuntos Corporativos de Coca Cola Femsa en Caracas, Rodrigo Anzola.
“La están realizando ex concesionarios que desde hace más de 5, 10, 15 años no tienen relación con la empresa”, agregó.
En el 2006, los ex trabajadores, apoyados por parlamentarios, realizaron protestas similares exigiendo beneficios laborales, pero luego fue levantado el bloqueo y se instaló una mesa de negociaciones para buscar solución al conflicto.
Coca Cola Femsa dijo que ha presentado en las discusiones propuestas para la atención social de un grupo de 2,500 personas que demostraron un antiguo vínculo con la empresa, pero los demandantes se han quejado de un extendido retraso en obtener una solución.
Anzola agregó que la paralización de actividades afecta la distribución a un 45% de sus 200,000 clientes locales. Coca Cola Femsa posee en Venezuela un total de cuatro plantas embotelladoras y 32 centros de distribución.
El ejecutivo dijo que a comienzos del mes se inició el bloqueo de tres centros de distribución, a los que se sumaron el domingo los otros nueve y la embotelladora.
Venezuela actualmente enfrenta problemas de abastecimiento de productos básicos como la leche, el azúcar y el pollo, lo que el Gobierno ha dicho se debe en parte al intento de algunas empresas para crear inestabilidad en el país petrolero.
“Esto pues evidentemente va a generar un desabastecimiento y escasez de nuestros productos como son agua, jugos, té y por supuesto refrescos”, acotó Anzola.
De acuerdo con la empresa, los manifestantes actualmente reclaman en conjunto una indemnización por el equivalente a 520 millones de dólares, lo que representa 1.5 veces el patrimonio de la compañía.
“Primero, no hay manera de hacer frente a una pretensión de ese tipo porque es absolutamente ridícula y absurda y segundo, no tiene ningún tipo de aproximación social sino aquí la gente lo que está buscando es hacerse rica sin ninguna acreencia sustentada desde el punto de vista jurídico”, afirmó Anzola.
El ejecutivo dijo que preparan recursos de amparo constitucional para eliminar la protesta, además de acciones civiles y penales contra los organizadores de los bloqueos.
