Alitalia tiene los días contados
Los vuelos de Alitalia serán suspendidos en caso de que la aerolínea no presente un plan de reducción de gastos en tres o cuatro días, se anunció hoy al tiempo que se abrió la subasta pública de sectores de la compañía.
"Altalia vuela con una licencia provisional. Si no llega un plan financiero en un lapso de tres o cuatro días la licencia será suspendida", declaró el presidente de Aviación Civil italiana, Vito Raggio, a la emisora Radio24.
Por su parte, el comisario extraordinario de la aerolínea, Augusto Fantozzi, confirmó la apertura de una subasta pública de ramas de la empresa y dio como plazo para presentar ofertas el 30 de este mes.
Alitalia publicó la invitación a presentar tales ofertas luego de que el proceso de privatización de la compañía fracasó debido a la falta de acuerdo entre el consorcio de empresarios italianos CAI (Compañía Aérea Italia) y los sindicatos.
En el sitio Fantozzi especificó que "la única oferta significativa (la de la CAI) y sobre la base de la cual se había abierto la negociación, ha sido revocada".
Dijo querer "verificar la existencia de otros sujetos interesados que puedan garantizar la continuidad en el mediano plazo del servicio de transporte, la rapidez de la intervención y el respeto de los requisitos previstos por la legislación".
En tanto, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, acusó al principal sindicato del país, la CGIL (Confederación General de Trabajadores Italianos) de "irresponsable" y de haber hecho fracasar la negociación con la CAI "sin pensar en el daño para el país".
"Son irresponsables; no miran por el bien del país ni piensan en los problemas sociales que se pueden crear", declaró el jefe de gobierno a la revista Affaritaliani.
"Están haciendo de todo para hacer fracasar el acuerdo; incluso llamaron bandidos a los empresarios de la CAI, con el resultado de desalentarlos y desmotivarlos. Ahora su receta producirá desocupación y desastres", añadió.
En la pasada campaña electoral Berlusconi prometió salvar a Alitalia y dejarla en manos italianas, además de que criticó la oferta presentada entonces por el grupo franco-holandés Air France-KLM, que también se retiró de la puja.
