La acción de Cemex cae 5% en la BMV
Las acciones de la cementera mexicana Cemex llegaron a caer hasta 7% esta mañana en los mercados accionarios, luego de que anunciara el inicio de conversaciones con bancos para renegociar unos 14,500 millones de dólares en deuda y que postergó la emisión de un bono por 500 millones de dólares.
La semana pasada, Cemex, que se ha visto golpeada por la crisis económica global, no logró fijar el precio de una emisión de bonos que buscaba colocar en los mercados internacionales.
"Cemex (...) ha iniciado conversaciones con sus principales bancos para renegociar la mayoría de su deuda de aproximadamente 14,500 millones de dólares en créditos sindicados y créditos bilaterales", dijo la empresa en un comunicado.
Las acciones de la cementera caían un 6.98%, a 6.30 pesos, en la Bolsa mexicana. Sus papeles en Nueva York bajaban un 6.48%, a 4.04 dólares, moderando su retroceso después de haberse precipitado un 7.18%.
"Cemex tiene la intención de cumplir todas sus obligaciones bancarias y de mercados de capital mientras se realizan estas conversaciones", dijo en un comunicado.
"El mercado estaba imposible la semana pasada. Cemex intentó, falló y ahora está de nuevo con los bancos", dijo James Harper, director de análisis corporativo de BCP Securities.
Cemex, la mayor cementera en Estados Unidos, lucha con su pesada carga de deuda tras adquirir en el 2007 a la australiana Rinker, en una de las mayores compras realizadas por una empresa de mercados emergentes.
Tras el anuncio, Merrill Lynch reiteró su recomendación de "neutral" sobre las acciones de Cemex, que habían caído más de un 15% el jueves y otro 7% el viernes, después de que fracasara la gira de la empresa para promover su emisión de deuda.
Sin embargo, Merrill Lynch bajó su precio objetivo sobre los papeles a 10 dólares, desde 12 dólares.
"Reafirmamos nuestra visión de que las dificultades de liquidez de la compañía no significan problemas de solvencia", dijo la ahora unidad de Bank of America en un reporte.
Los inversores en Cemex también están preocupados del impacto del peso mexicano, que ha perdido una cuarta parte de su valor desde octubre pasado, y el alto nivel de deuda de la empresa, mientras cae la demanda global por materiales de construcción.
