Empresas pierden tras deceso de Jackson
AEG Live, una de las más poderosas compañías organizadoras de espectáculos, perderá cientos de millones de dólares tras la muerte de Michael Jackson y su fallido regreso a los escenarios con la gira que iniciaría en Londres.
Hace apenas unas semanas, el Rey del Pop anunció su retorno con la gira de despedida de Londres, donde en cuestión de minutos se vendieron 50 conciertos.
Por cada uno de los conciertos, Michael ganaría un millón de dólares, pero AEG Live perderá unos 360 millones de dólares invertidos en la organización y promoción del evento.
Los conciertos en Londres iniciarían el 13 de julio y para ello, el famoso cantante ensayaba en una exclusiva locación privada en la ciudad de Burbank, a unos 40 kilómetros al norte de Los Ángeles.
AEG Live había ya invertido 20 millones de dólares en la producción que el mismo Michael había presumido como la más espectacular y nunca antes vista, ya que tendría 22 escenarios, algunos movibles, así como efectos de luces y alta tecnología.
La organizadora de espectáculos, propiedad del millonario de Colorado, Philip Anschutz, es la misma compañía que es propietaria del Staples Center, el complejo de entretenimiento LA Live y tiene acciones en Lakers de Los Ángeles.
Con el deceso de Michael, la tarde del jueves, AEG Live deberá reembolsar 85 millones de dólares que ingresó por la venta de boletos y de lo cual la compañía esperaba tener ganancias estimadas por 115 millones de dólares.
La compañía había ya iniciado conversaciones con el cantante para realizar una gira mundial de tres años y tener una ganancia directa de 450 millones de dólares.
Por su parte, Greg Maffei de Liberty Media Corp. declaró en una entrevista a CNBC que su compañía verá inmediatamente afectada su participación en Ticketmaster por el inesperado deceso de Michael Jackson.
Se esperaba que Ticketmaster recibiera un impulso financiero por la próxima gira del Rey del Pop. Claramente Michael Jackson era un gran artista, indicó Maffei, de manera que resulta obvio que su muerte "no es positiva" para la industria del entretenimiento.
Con información de Dow Jones
