Magna y empleados de Opel logran pacto
Los sindicatos de Opel acordaron contribuir con 265 millones de euros (390 millones de dólares) en ahorros anuales si General Motors finalmente vende una participación mayoritaria de esa firma, que es su brazo europeo, a un grupo liderado por la canadiense Magna.
"Los recortes son dolorosos para todos nosotros, pero estamos preparados para asumir las responsabilidades", dijo el líder laboral de Opel, Klaus Franz, en una declaración tras semanas de conversaciones con trabajadores en toda Europa.
El acuerdo, que es respaldado por 50,000 empleados de Opel -cerca de un quinto de los cuales se supone perderán sus trabajos bajo los nuevos dueños- hizo avanzar un paso a la operación, pero la junta de directorio de GM aún tiene que dar la luz verde final esta semana.
Bajo presión para reducir la plantilla y lograr utilidades ahora que la fabricante de autos estadounidense ha emergido de la bancarrota, el directorio de GM ha acordado vender un 55% de participación en Opel a Magna y a su socio ruso Sberbank.
Pero las autoridades de competencia de la Unión Europea han pedido a GM que confirme que tomaría la misma decisión sabiendo que 4,500 millones de euros en ayuda estatal prometidos por Alemania irían a cualquier comprador de Opel, no sólo a Magna, el oferente favorecido por Berlín.
El presidente ejecutivo de GM, Frederick "Fritz" Henderson, ha expresado confianza en que la venta se realice pronto, pero el nuevo directorio que supervisa GM desde que salió de la bancarrota en julio se ha rehusado a actuar como garante de los deseos de la gerencia.
Una fuente dijo el mes pasado que todavía había una posibilidad de que el directorio de GM pudiera optar por descartar una venta de Opel y quedarse con el fabricante europeo de autos.
