Geithner afronta a legisladores por AIG
Timothy Geithner, secretario del Departamento del Tesoro de EU, declaró ante los legisladores que no tuvo ninguna injerencia en el aparente intento de los reguladores gubernamentales de ocultar información crucial en torno al rescate de la aseguradora AIG.
AIG y la Reserva Federal de Nueva York son objeto de varias investigaciones federales para descubrir si la entidad supervisora instruyó a AIG a no revelar varias transacciones polémicas a la Comisión de Valores y Bolsa estadounidense.
"No tuve ningún papel en la toma de decisiones respecto a qué revelar sobre las condiciones financieras de Maiden Lane II y Maiden Lane III (las empresas que la filial neoyorquina de la Fed determinó que comprarían los activos problemáticos de AIG), y los pagos a las contrapartes de AIG" expresó Geithner.
Las transacciones cuestionadas se realizaron cuando Geithner dirigía la Fed de Nueva York, principal supervisor del rescate a AIG por 181,000 millones de dólares (mdd).
La Comisión de Supervisión del Congreso ha requerido el miércoles el testimonio de Geithner, del ex secretario del Tesoro Henry Paulson, de Neil Barofsky -inspector especial del rescate financiero de 700,000 mdd- y de los abogados de la Fed neoyorquina y de AIG.
Por su parte, Ben Bernanke también se ha deslindado de cualquier decisión involucrada con el ocultamiento de información de AIG, pero admitió que conocía la decisión. "No estuve directamente involucrado en la discusión con AIG referente a esa decisión, entiendo que funcionarios de la Reserva Federal y sus consejeros externos apoyaron la solicitud inicial de AIG ante la Comisión de Valores de mantener confidenciales los nombres de las contrapartes que vendieron (activos) a Maiden Lane III" declaró.
Paulson, quien fungía como secretario del Tesoro en ese tiempo, tuvo un papel supervisor diferente sobre AIG y no participaba de la toma de decisiones en la Fed neoyorquina. De acuerdo al testimonio que preparó para hoy, respaldará el rescate de AIG realizado por el gobierno: "La decisión de rescatar a AIG fue correcta, la apoyo fuertemente. El fracaso de la aseguradora hubiera sido devastador para el sistema financiero y la economía".
El problema
El rescate de AIG ha sido muy polémico en cuanto la aseguradora se ha convertido en un símbolo de la ambición corporativa, la conducta riesgosa y la ausencia de regulación, factores que muchos creen fueron la causa de la Gran Depresión.
Uno de los temas más controvertibles es la decisión de la Fed neoyorquina de pagar a las contrapartes 100 centavos sobre el dólar por los activos que AIG había asegurado a través de los llamados contratos de swaps. Como resultado, 62,100 mdd provenientes de los fondos de AIG y de los contribuyentes fueron canalizados a 16 bancos que fungieron como contrapartes en coberturas por riesgos crediticios emitidas por AIG.
Poco después, Barofsky (responsable del Programa de Alivio para Activos Tóxicos) informó tras una auditoría que la Fed de Nueva York había fracasado al usar su influencia para negociar las concesiones de los socios de AIG.
La Comisión de Supervisión del Congreso posteriormente solicitó los documentos usados en la auditoría de Barofsky, los cuales revelaron que la Fed neoyorquina instruyó a AIG a no hacer ninguna referencia -ante la Comisión de Valores y Bolsa- de que las contrapartes habían recibido el pago a un valor de dólar por dólar.
Se espera que Geithner reconozca que participó en la decisión de ofrecer el valor íntegro de los activos y que defienda su pertinencia. Pero en cuanto a proponer que esas transacciones no fueran reveladas, Geithner se desvinculará alegando que para ese entonces ya no formaba parte de las operaciones cotidianas de la Fed neoyorquina, pues dejó estas actividades tras el anuncio de su candidatura como secretario del Tesoro.