Agente de viajes, un empleo ‘espacial’
En 1914 un exalcalde de Florida pagó el equivalente a 9,300 dólares corrientes para volar en el primer vuelo aéreo comercial del mundo. El viaje de 23 minutos desde San Petersburgo (Florida) a Tampa no tuvo nada de glamuroso, el hidroavión era de madera y viajó a velocidades que no superaban los 100 km por hora, pero el hombre estaba dispuesto a pagar el exorbitante precio por un viaje que en aquel tiempo parecía fuera de este mundo.
Cien años más tarde, alrededor de 600 viajeros han pagado hasta 250,000 dólares para ser parte de un suceso de similar naturaleza etérea: los primeros vuelos comerciales al espacio, cortesía de Virgin Galactic, la empresa de turismo espacial de Richard Branson . Aunque el concepto pueda sonar estrambótico, incluso peligroso, la red de viajes de lujo Virtuoso está trabajando para materializar el concepto y ofrecerlo a un puñado de clientes adinerados.
"Virgin Galactic quería una compañía que pudiera llegar y desmitificar la experiencia", explicó el CEO de Virtuoso, Matthew Upchurch. Su compañía tiene los derechos exclusivos para reservar asientos en las aeronaves de Virgin Galactic para pasajeros del continente americano, norte, centro y sur. "Se trata de humanizar la experiencia y hacerla más accesible".
En un momento en que el tradicional agente de viajes parece ser una profesión en extinción, las 335 agencias miembros de Virtuoso con más de 7,200 agentes de viajes ingresaron 12,500 millones de dólares en ventas el año pasado. La compañía trabaja para mantener su relevancia en la era digital mediante la creación de "experiencias de viaje" (un término clave en la era de las reservas en línea) para un amplio abanico de clientes, desde los muy acaudalados a los de recursos modestos.
Vender experiencias
Virtuoso tiene 56 "agentes espaciales acreditados" o ASA (accredited space agents), que asisten a los clientes a través del complicado proceso de inscribirse en Virgin Galactic -exámenes médicos, la aprobación del cónyuge, actualizaciones regulares sobre el progreso del programa, entre otros-. Aunque las operaciones comerciales de la compañía aún no han comenzado, la firma de Branson planea lanzar este año vuelos suborbitales con seis pasajeros.
"Yo trabajo para los futuros astronautas, no para Virgin Galactic", señaló un agente ASA de Virgin Galactic y el presidente de una agencia miembro de Virtuoso, Jay Johnson. "No les endulzo nada, solo los mantengo motivados. Mi principal preocupación es mantener feliz al cliente y si tienen alguna inquietud los ayudo a resolverla".
Johnson ha logrado reservar ocho asientos en futuros vuelos de Virgin Galactic. Aunque se negó a revelar la comisión exacta que gana de Virgin Galactic por inscribir pasajeros, dijo que él no se unió al programa ASA por el dinero. Los clientes que conoce a través de Virgin Galactic se vuelven rentables para él gracias a otras oportunidades de reserva de viajes. Por ejemplo, acaba de planificar una experiencia de viaje de 14 meses alrededor del mundo para un cliente que conoció al organizarle su viaje espacial.
La comisión estándar para un agente de viajes es aproximadamente el 10% del costo total del viaje, pero el posicionamiento de Virtuoso como una agencia de lujo permite que sus agentes ganen más por sus servicios.
"Internet es genial si quieres experiencias muy simples", expuso un analista de viajes de Hudson Crossing, experto en populares herramientas de viaje como Expedia y Travelocity, Henry Harteveldt. "Pero los agentes fuera de línea que han evolucionado la forma de hacer negocios como Virtuoso probablemente estén siendo más exitosos hoy en día, pues se han visto obligados a convertirse en mejores agentes de negocios. Han pasado de girar pedidos a construir sueños".
Ser el primero
Como uno de los fundadores de Galactic, el CEO de Virtuoso estará entre las primeras 80 personas enviadas al espacio por Virgin. Con el tiempo, el costoso precio de un boleto suborbital disminuirá, como lo hizo la tarifa aérea comercial después del primer viaje en 1914, señaló Upchurch.
Pese a lo anterior, Upchurch anima a todos los que puedan costearse el paseo espacial a inscribirse cuanto antes, aunque sea para aprovechar las increíbles prebendas que Richard Branson ofrece a sus futuros astronautas.
"Para aquellos de nosotros que dimos nuestro depósito hace siete años y queremos que nuestro dinero valga la pena, hemos quedado plenamente pagados con las fiestas", dijo con una sonrisa.