‘Vikingos’ toman barco de Oceanografía
Un grupo de acreedores, encabezados por la firma noruega Norks Tllitsmann, tomó el control de la embarcación OSA Goliath, propiedad de Oceanografía, con el fin de venderla para saldar una deuda cercana a los 251 millones de dólares (mdd).
“El nuevo Consejo Directivo ha finalizado el capítulo sobre el arrendamiento de la embarcación con Oceanografía, y asumió el control del bote OSA Goliath. El Consejo ha informado a Norks Tllitsmann que buscará vender la embarcación en un proceso ordinario y proveerá más información de la venta más adelante”, explicó la firma escandinava en una carta difundida en su sitio de Internet.
Oceanografía, a través de OSA Goliath, informó en septiembre del año pasado que había logrado colocar bonos por un monto de 160 mdd para el arrendamiento de una embarcación con el mismo nombre, que al final arrendó a Pemex Exploración y Producción (PEP), según datos de Oceanografía en su sitio de Internet.
El Gobierno mexicano inhabilitó a la compañía de Amado Yañez el 14 de febrero, lo que ha desembocado en una investigación por presunto fraude y lavado de dinero en contra de Banamex por un monto de 585 mdd, derivado de cuentas incobrables.
“Con esta operación Oceanografía SA de CV consolida su flota al contar con la embarcación más moderna para trabajos Costa Afuera en el Golfo de México. Esta embarcación tiene una eslora de 180 mts y cuenta con sistemas de grúas el principal con capacidad de carga de hasta 1760 toneladas y dos grúas auxiliares de 100 toneladas cada una entre sus principales características”, describe la compañía a OSA Goliath en un video publicado en YouTube.
Norks Tllitsmann argumenta que, tras la declaración de impago de la deuda de Oceanografía, exige 251.4 mdd, una cifra que ya incluye intereses, pero que está sujeta a futuras revisiones.
La firma noruega ya ha asegurado 8.9 mdd de cuentas bancarias de Oceanografía, dijo este miércoles.
Entre 1999 y 2013, Oceanografía obtuvo poco más de 160 licitaciones públicas nacionales e internacionales para proveer servicios y obra pública, principalmente para Petróleos Mexicanos (Pemex) y su subsidiaria Exploración y Producción (PEP), relacionados con labores de inspección, monitoreo, reforzamiento, mantenimiento, flete, transportación, hospedaje, alimentación, rehabilitación de pozos y construcciones, por un monto que superaría los 31,000 millones de pesos (mdp).
La decisión de la firma noruega se dio a conocer poco antes de que el Gobierno de Puebla difundiera que retiró a una filial de Oceanografía la concesión para la construcción y operación de una carretera.
