Barclays despide a su CEO
Barclays ha depuesto a su director ejecutivo Antony Jenkins luego de tres años en el cargo.
El presidente John McFarlane fungirá como presidente ejecutivo hasta que se nombre un nuevo CEO.
El banco británico, que opera divisiones de banca minorista y de inversión, dijo que este despido no representa un cambio importante en su estrategia, pero que era necesario un nuevo liderazgo.
"Era evidente para nosotros que se necesitaba un nuevo conjunto de habilidades para la próxima era", dijo el vicepresidente de Barclays, Michael Rake, en un comunicado enviado este miércoles.
Los inversionistas se mostraron contentos con el cambio de liderazgo, las acciones de Barclays subieron 3% en la Bolsa de Londres.
Mike van Dulken, analista de Accendo Markets, dijo que la positiva reacción de las acciones sugiere el "optimismo del mercado de que el sucesor [de Jenkins] pueda satisfacer mejor a la junta directiva en materia de desempeño financiero y cambio estratégico."
Jenkins había instrumentado una importante transformación de la firma, que incluyó masivos recortes de empleo, con el propósito de subsanar las finanzas del banco y restaurar su reputación tras una serie de escándalos.
Jenkins, antes responsable de la banca minorista de Barclays, tomó las riendas de la entidad de manos de Bob Diamond en medio del escándalo de manipulación de la tasa Libor que le ha costado al banco miles de millones en multas.
Diamond renunció como CEO en 2012 después que el banco admitiera que sus empleados conspiraron para manipular la tasa interbancaria de Londres o Libor, que se usa para determinar el interés pagado en préstamos de todo el mundo por valor de billones de dólares.
En ese momento, Jenkins pidió que no se le otorgara un bono en el año 2012 dada su responsabilidad compartida en muchos de los problemas del banco.
"Es fácil olvidar lo mal que estaban las cosas hace tres años, para nuestra industria y para nosotros", dijo Jenkins en la declaración del miércoles
