La otra crisis que ‘perfora’ a Pemex

La caída de los precios internacionales del crudo que ha aquejado a Petróleos Mexicanos (Pemex) desde finales de 2014, ha repercutido en varios niveles de su desempeño, pero la perforación, el único medio que tiene tanto para extraer petróleo como para asegurarse que lo encontrará en el futuro, disminuyó casi 50% en 2015, lo que se convierte en un círculo vicioso para la paraestatal.

Pemex perforó apenas 278 pozos durante el año pasado, lo que implicó un desplome del 48% anual, según cálculos de CNNExpansión con cifras de la Base de Datos Institucional de la petrolera.

Este número significó además el menor en 16 años, cuando en 1999 perforó apenas 230 pozos, aunque en un contexto muy distinto, pues entonces la paraestatal requería de menos excavaciones para extraer una mayor cantidad de crudo. Además el descenso de 48% supone la mayor tasa de debacle en el mismo periodo, superando a los decrementos de los años anteriores, cuando tuvo bajas de 45% en 2013 y 24% en 2014.

El número de equipos dedicados a la perforación también registró una disminición de 37% anual, al pasar de un promedio de 106 en 2014 a tan sólo 67 en 2015. La cifra se ubica como la menor desde 2001 cuando la petrolera sólo requirió de 50 equipos para la perforación de 449 pozos, lo que muestra una mayor eficiencia por cada aparato frente al contexto actual.

Pemex, como la mayor parte del sector petrolero internacional, ha reducido costos y paralizado proyectos ante la caída de los precios del crudo, que han pasado de los más de 100 dólares en el tercer trimestre de 2014 a cerca de los 20 dólares a inicios de este 2016.

“Las condiciones de la industria petrolera son las más complicadas en la última década debido a la caída de los precios del petróleo. Ante menos utilidades para las petroleras, las empresas a nivel internacional ha realizado ajustes en exploración y producción que, hay que recordarlo, es donde es más atractivo invertir, y por tanto donde más hay parar recortar”, explicó el analista del sector para Solano Consultores, Arturo Carranza.

El especialista recuerda que el efecto inmediato de esta falta de perforación tanto en exploración como en producción se ve en una menor cantidad de crudo extraído durante el año, así como una muy probable caída en la sustitución de reservas para Pemex.

La producción de crudo de Pemex cayó cerca de 6% el año pasado al colocarse en apenas 2.27 millones barriles diario promedio, que además de resultar en su peor caída anual en seis años, también se colocó como la menor cifra desde 1980.

La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) aún debe dar a conocer los datos auditados de las reserva petroleras nacionales al cierre del 1 de enero de 2016, pero el año pasado éstas ya registraron una reducción debido a una menor capacidad de Pemex para reemplazar cada barril extraído ese año con una reserva lista para explotarse.