Herramienta legal para la prevención

Los diferentes contratos se celebran con la voluntad de cumplir las obligaciones y exigir los derechos que contienen.  Debido a eso, el incumplimiento de las obligaciones derivadas de un acuerdo de voluntades acarrea efectos indeseables en toda relación contractual.

El adecuado desarrollo del proyecto ejecutivo, la oportuna y eficiente procura y suministro de materiales, el cumplimiento de reglamentos y estándares de construcción y calidad, la ejecución de los trabajos en la forma y tiempo convenidos, y la manera de enfrentar eventos imprevistos  como casos fortuitos o de fuerza mayor son, entre otros, los aspectos que definen claramente el cumplimiento o el incumplimiento de los contratos.

En este contexto, la adecuada administración de las obligaciones legales y contractuales del proyecto puede ser la herramienta que permita la disminución de los márgenes de error, así como las posibilidades de incumplimiento. La administración legal de un contrato requiere formas sencillas. He aquí algunas:

Lea, lea y lea: los contratos, al igual que la comida, se digieren mejor si se mastican muchas veces. Leer los contratos y comprender sus alcances le dará una mejor visión de los temas.

Identifique riesgos concretos, documéntelos y compártalos: todo proyecto tiene sus partes fuertes y sus partes débiles. La identificación de los aspectos que pueden ser críticos (por ejemplo, plazo de ejecución, suministro de materiales y equipos, y elementos geográficos).

No pierda el enfoque y sea perseverante (por no decir terco): una vez identificados los problemas potenciales, no ceda y mantenga vivo el control sobre los asuntos críticos.

Hoy en día, prever más que enfrentar los incumplimientos es indispensable para lograr proyectos exitosos, tanto en lo técnico como en lo económico, y de este modo evitar fracasos que pueden costar daños irreparables a la empresa en tiempos aciagos.

Abogado, socio director de COMAD, SC.*