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El vestuario del éxito

“Vístete para el empleo que quieres y no para el que tienes la imagen que proyectas influye en tu ámbito laboral o en la entrevista de trabajo que te espera.
mar 16 febrero 2010 06:02 AM
Puedes proyectar una imagen de éxito con un simple cambio de apariencia. (Foto: Jupiter Images)
imagen-traje-ejecutivo-banderas (Foto: Jupiter Images)

Todos los profesionales se pueden beneficiar si prestan mucha atención a sus vestimentas  en una entrevista de trabajo. De hecho, hay empresas que  indican que el estilo de vestir de una persona influye en sus posibilidades de obtener un trabajo o hasta un ascenso . La vestimenta en el trabajo afecta de manera importante en las perspectivas de desarrollo de un empleado. Ten en cuenta que aunque un estilo impecable no necesariamente te hará obtener lo que buscas profesionalmente, vestir de manera inapropiada te puede costar un empleo.

Si te preguntas si una prenda de vestir es adecuada para  la entrevista de trabajo, probablemente no lo es. Cuando tengas la duda, no te arriesgues. Por ejemplo, evita prendas que "muestren demasiado", incluidas las camisetas con tirantes, los jeans de tiro corto, las camisetas y las faldas cortas.

No permitas un traspié en tu imagen profesional sólo porque llegaron los perezosos y relajados días de verano. Incluso en los viernes informales, guarda el uniforme playero de sandalias, traje de baño, camisa hawaiana y audífonos para la playa o la piscina.

Mantente en el juego y evita vestir cualquier tipo de ropa. Incluso la vestimenta más adecuada y profesional puede lucir descuidada y poco atractiva cuando está arrugada. Antes de salir de casa, asegúrate de que tu ropa no tenga arrugas, manchas, ni hilachas.

Vestirse para el éxito en una entrevista no requiere mucho dinero ni asesorías televisadas con expertos en moda.

Tampoco debes abandonar completamente tu sentido único de estilo. Al comprender simplemente la importancia del atuendo, ejercitar el buen criterio para vestirte y pecar de precavido, puedes crear una imagen refinada que sólo ayudará a tu profesión.

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La primera oportunidad que tú y tu vestuario tienen para impresionar a un empleador ocurre durante la etapa de la entrevista . Desafortunadamente, este encuentro inicial es el único donde tienes la menor cantidad de información para prepararte. En esta etapa, probablemente nunca antes has estado en la compañía y no conoces los detalles acerca de los códigos de vestimenta y la cultura de la oficina.

Mejor vestirse un poco de más y no de menos.

Hay oficinas que el ambiente es más  bien informal, y es un lugar creativo, pero un entrevistado que recién llega no lo sabe. Se espera que el entrevistad use una vestimenta de oficina, preferiblemente un traje. Es grato que luzcan como personas a las que les interesa el negocio, y que sean maduros para manejarse en un lugar de trabajo con ritmo rápido.

El escepticismo del empleador empieza cuando observa el  atuendo inapropiado entrando a la sala de entrevistas. Si no usas su mejor vestimenta de oficina para tu primera entrevista, harás pensar que no te interesa el trabajo. Es difícil tomar en serio a alguien que use sandalias, un pantalón de mezclilla con motivos simétricos o una playera blanca.

Muchas industrias adoptan los atuendos informales; sin embargo nos advierte acerca de los empleados que confunden informal con descuidado.

Para la entrevista será ideal que muestres que has hecho un esfuerzo, tal como harías con tu propio producto.

Toda vez que has estado en busca de un trabajo por un tiempo lo suficientemente largo, puedes tentarte a ponerte cualquier cosa que esté limpia (o suficientemente limpia) y tropezar en la entrevista de trabajo. Tu apariencia es un factor constante en cuánto a cómo los demás te perciben, a ti y a tu profesionalismo.

Sigue el ejemplo de cómo se visten los gerentes en la organización para tus elecciones de atuendo. "Dar la apariencia de" ayudará a que tu empleador te imagine en el cargo que buscas. Vístete para el puesto que quieres y no para el que tienes. Esto es una buena forma de causar una fuerte impresión en tu empleador y en tu futura carrera dentro de una organización.

*La autora es ejecutiva senior de Gen-T y Vocera de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH).

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