Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

Los retos de Bruno Ferrari

El nuevo titular de Economía debe atacar el desempleo como tarea prioritaria; dice Sergio Raimond; para lograrlo, existen ejemplos y soluciones que ya han probado su efectividad en otros países.
vie 16 julio 2010 08:30 AM
El nuevo secretario de Economía, Bruno Ferrari, necesita crear un “Pacto Económico” para iniciar sus tareas. (Foto: Notimex)
bruno ferrari secretaria economia

El nombramiento de Bruno Ferrari como titular de la Secretaría de Economía (SE) abre una ventana de oportunidad para elevar la competitividad de México.

En su ámbito de responsabilidad recae las acciones del "Gabinete Económico" para aliviar la secuela de la crisis financiera y el problema migratorio 2008-2010, pues es urgente resolver el desempleo agravado por los 400 mil migrantes mexicanos anuales que ya no se pueden ir a Estados Unidos.

Su nombramiento resulta oportuno para evitar mayor deterioro del tejido social porque tendrá que implementar medidas rápidas por las dos vías que él ya conoce: robustecer los puentes de acceso a los mercados mundiales para los bienes y servicios que se producen en México y crear las condiciones para superar la débil demanda interna que enfrentan los empresarios de empresas medianas, pequeñas, micro y de los "Repecos" (Régimen de Pequeños Contribuyentes) de campo y ciudad, porque son ellos quienes salvarán al empleo y la planta productiva del país.

Vivimos un  fenómeno de crisis excepcional con matices nuevos nunca antes experimentados y, por lo mismo, requiere mediadas excepcionales. Por la rapidez de las medidas, Bruno Ferrari tendrá que concertar con urgencia un Pacto Económico entre sectores, en el que comprometa a que cada quien dé más de lo que sabe y puede dar, convirtiendo la "externalidad" en positiva: "Ganar y gastar" es una iniciativa que daría trabajo a desempleados y migrantes frustrados; es el modo de fortalecer el mercado interno y el empleo; que las personas tengan trabajo, tengan ingresos y lo gasten en el mercado interno.

Una idea para dicho pacto puede ser "3X3 = UN MILLON": Empresarios (grandes, medianos, pequeños, micros, Repecos de ciudad y campo) darían entre 3% y  5% de empleo a cambio de que bancos y financieras y autoridades asuman tres medidas  (que en otros países sí manejan): (a) bajar las tasas de interés al crédito industrial, hipotecario y al consumo (a 4 puntos sobre inflación); (b) bajar la tasa de ISR a las utilidades (por ejemplo al 12%); y (c) promover tipo de cambio estable pero no apreciado. Este Pacto resultaría imposible en otras circunstancias.

Es momento de que autoridades y financieras asuman el compromiso con esas tres medidas, pues tienen el modo. En esta circunstancia de excepción, no deben eludir la responsabilidad traspasándola a "la mano invisible del mercado". La "oferta y la demanda" es viable sólo en épocas normales.

Publicidad

La tasa de interés de referencia ha bajado en todo el mundo, que es la tasa de fondeo para los gobiernos y para las empresas grandes (4.5% para México); pero en México y los demás países latinoamericanos el gap de la tasa de interés para los créditos es muy alta. Con inflaciones de 4%, las tasas activas son del 12% para arriba, cuando por costo de fondeo, inflación, y riesgo deberían estar entre 6.5% y 8%.

Para animar a reducir las tasas activas, como en países en otras latitudes, se puede crear un Sistema Nacional de Garantías, de costo bajo y manejo eficaz. Ya hay experiencias exitosas. Un buen Sistema Nacional de Garantías cuesta menos que los dramáticos e inequitativos "rescates".

El Pacto induce a que toda la planta productiva del país proporcione el millón de empleos por año, resolviendo este reto "en casa": se fortalece el mercado interno; genera alianzas y acercamiento Autoridades-Empresas. Este Pacto también crea las condiciones para poder exportar y entusiasma a empleadores y empleables; engrandece a empresas pequeñas y equilibra a campo, industria, comercio y sector financiero. Además, termina fortaleciendo las finanzas públicas por el crecimiento de empleo y producción.    

Bruno Ferrari ya tenía conocimiento, visión, determinación y experiencia. Ahora tiene "la llave" de acceso para liderar las voluntades del sector productivo y conciliar con autoridades en un objetivo común: el empleo en México.

Otra consecuencia de este pacto es volver a México más productivo y esto se reflejará en los Rankings mundiales, subiendo a México en 10 lugares, en los próximos cinco años. 

Como un buen tenista de clase mundial, Bruno Ferrari tiene que ir al rescate de un juego que se considera perdido para no sólo devolver la bola, sino lograr la perfecta colocación para ganar el punto y darle vuelta al partido.

*El autor es profesor de Entorno Económico del IPADE. Sus áreas de especialización son estrategias de competitividad, oportunidades de negocio, ejercicios de vulnerabilidad y generación de empleo productivo. Es miembro de la International Academy of Management y fue director general del IPADE de 1980  a 2002.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad