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Empleo, ¿solución mágica?

El trabajo es un elemento esencial en todo país para combatir la crisis, dice Mauricio Hubard; Gobierno, empresas y sociedad deben agruparse para resolver del mejor modo el desempleo.
jue 25 noviembre 2010 06:03 AM
Los profesionales mexicanos se encuentran en una encrucijada entre permanecer desempleados o practicar una profesión diferente a la estudiada. (Foto: AP)
empleo (Foto: AP)

Muchos son los problemas que México tiene; si bien no todos somos causal de muchos, todos somos responsables de la solución. Nuestro país está en manos de cada uno y como dice el dicho popular "somos parte de la solución o del problema". Seguramente si pidiéramos a 100 mexicanos que nombraran el principal problema de la actualidad, mas de 90 mencionarían la violencia. Yo no lo creo así, si bien es grave y  el más visible (por las noticias y la "paz social" de la que tanto se hablaba hasta hace unos años, especialmente en tiempos electorales) creo firmemente que los dos principales problemas por resolver son la generación de empleos y la educación, ambos con la misma prioridad y ambos entrelazados. 

Se acuerdan hace un tiempo que salió la noticia sobre una manifestación de ciudadanos enmascarados apoyando a los narcotraficantes en Monterrey. En esta, presentaban letreros en contra del Gobierno y a favor de los delincuentes; mas tarde, un reportero entrevistaba a un niño que había participado en la manifestación y al cuestionarle el motivo de su apoyo al narco, contesto que no era así, pero que le habían dado 200 pesos por hacerlo y su mama estaba muy necesitada de dinero. 

La falta de oportunidades de trabajo, de herramientas para las micro, pequeñas y medianas empresas como el financiamiento, sumados a una deficiente educación, son parte del motivo por el que este niño tuvo que aceptar este "trabajo".

El empleo no es una solución mágica, es una solución de fondo a muchos de los problemas que afectan actualmente a la gran mayoría de los países. 

Estados Unidos, por ejemplo, ha invertido billones de dólares en el rescate a su sistema financiero, en programas que buscan activar la economía y generar empleos a costa de un endeudamiento importante; en muchas cosas les ha funcionado, menos en el factor mas importante: el desempleo. Esto les ha llevado a anunciar recientemente un nuevo programa orientado específicamente a este problema.

En Europa, se presenta el mismo caso. Una parte importante de su población no tiene trabajo,  miles de familias sin capacidad para generar ingresos y como consecuencia ha aumentado la economía informal; en Inglaterra, España y Francia, por ejemplo, están resurgiendo negocios como las casas de empeño.    

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Seria muy interesante el poder saber con precisión, que porcentaje de la gente que se dedican a algún tipo de actividad criminal, la dejarían si tuvieran acceso a un empleo bien remunerado, que les permitiera cuidar a su familia.

Soy optimista por convicción (lo contrario significaría darse por vencido y no luchar día a día por un mejor México), por esto y por la increíble oportunidad que he tenido de ver como la actividad productiva en sus diferentes formas: micro y pequeños negocios, empleos en medianas y grandes empresas, actividades profesionales, etc. dignifica a las personas, les genera satisfacción, esperanza y seguridad en si mismos, etc. por esto creo que la respuesta a el planteamiento del párrafo anterior seria que una gran mayoría dejaría el crimen. 

A qué no estaríamos dispuestos a hacer como padres por nuestros hijos  La respuesta, variaría en base a la educación de quien respondiera; seguramente a todo, contestaría alguien a quien se le ha negado el acceso a una buena educación, a casi todo debería ser la respuesta de quienes hemos tenido el privilegio de está, por que en nuestro país es  privilegio de pocos la educación de calidad, pero es un derecho de todos y cada uno de los mexicanos, de los mas importantes.

El Presidente Calderón anuncio recientemente una cifra récord de empleos generados en el país, hemos recuperado los empleos que la crisis financiera internacional elimino. Son muy buenas noticias, pero no suficientes empleos.

La experiencia de platicar con clientes  que tienen acceso a un microcrédito para mejorar su negocio es única, el ver lo que con su trabajo, creatividad y el acceso a este tipo de herramienta financiera logran es digno de admirar. Estos grandes empresarios con micro y pequeñas empresas son los responsables del mayor porcentaje de los empleos generados en México. 

Hay que reconocer, que por parte del Gobierno Federal a través de la banca de segundo piso como Nacional Financiera (Nafinsa), FIRA, Financiera Rural, etc. o instituciones como el Programa Nacional de Financiamiento al Microempresario (Pronafin), se han desarrollado programas que están orientados al apoyo a las MiPYMES (Micro, Pequeña y Mediana Empresa), los que han logrado muy buenos resultados en el logro de acercar las oportunidades financieras a este sector de la población; estos  son manejados de forma muy profesional y honesta.

Hay también grandes programas orientados al apoyo de industrias en general y que son en su mayoría manejados por La Secretaria de Economía, donde hay una Sub Secretaria para la Micro y Pequeña Empresa. 

Se necesitan mejores soluciones, si partimos de la base de que la mayoría de los empleos los generan como se menciona anteriormente las Mipymes, deberíamos de crear una Secretaria especializada para este sector, con lo que seguramente se lograría un mucho mayor desarrollo de la Base de la Pirámide  y por lo mismo la capacidad de generar empleos seria exponencial.

Pero no es únicamente labor del Gobierno, los empresarios tenemos una gran responsabilidad con nuestro país en la solución de este problema. El Dr. Salvador Ceron, especialista en temas de empresa, afirma con toda razón "Ser empresario, significa ser emprendedor, crear y aprovechar nuevas oportunidades; de otra forma, solo son administradores de herencias o patrimonios", emprendiendo, generamos empleos. 

Emprender un negocio es muy difícil, debemos buscar que sea mas fácil, financiamiento, apoyos técnicos, entre otros.  Podrían las universidades enfocar sus programas a fomentar emprendedores; si bien no es algo para todos, estos recintos son el punto de partida ideal para despertar y encaminar el instinto emprendedor en quienes lo traen dentro.

El empleo  y/o actividad productiva, no solo genera ingresos para la persona y su familia; trae consigo bienestar, tranquilidad, una mejor adaptación social y por lo mismo mejores comunidades, que sumadas dan un mejor país; el desempleo, lo contrario. 

Necesitamos que los negocios, sin importar si son micro o grandes, tengan acceso a financiamiento, mejores esquemas fiscales, a gente preparada a fin de generar el valor agregado adecuado y como consecuencia la generación de riqueza que se requiere para salir adelante, para tener cada día menor población en pobreza y mas en la clase económica media, lo que a su vez, generara mas empleos y así entraríamos a un circulo virtuoso de la economía; no es algo que se logre en un año o un sexenio y por esto la importancia de la participación de los empresarios, sociedad, gobierno, sector educativo, etc.

Hoy el lograr esto esta en nuestras manos y tenemos la responsabilidad de actuar todos y cada uno a fin de heredar un México mejor a nuestros hijos, de otra forma les heredaremos los mismos problemas pero mas grandes y seguirá ocurriendo otro gran problema de la actualidad, la fuga de gente preparada y con posibilidades de aportar a la solución que necesitamos. 

Aquí no se escribe nada nuevo, todos lo sabemos; pero estamos a tiempo para que estos temas retomen en la sociedad el peso que tienen en la solución a muchos de nuestros problemas.

A 20 meses de las elecciones para presidente, exijamos que en los programas de gobierno de los candidatos de cada partido político, estos puntos sean eje de sus programas de gobierno, pero que presenten a detalle el como lograrlo y no solo retórica que genera votos. 

¿Es el empleo solución mágica?  Solución, si; mágica, no. En realidad es lógica simple que requiere por su complejidad de implementación y la participación de todos.

*El autor es fundador  y presidente de En Confianza, microfinanciera; estudió relaciones industriales en la Universidad Anáhuac del Sur y tiene una maestría de negocios en Hardvard.

 

 

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