Quizá para la sociedad en general el término de gobierno corporativo suena como algo lejano, distante o hasta inalcanzable, pero en esencia es prácticamente cómo gobernar a las empresas y organizaciones para lograr el fin por el cual fueron creadas. Esta gobernabilidad se enfoca a tres elementos: los accionistas o inversionistas, los consejos de administración con sus consejeros y el director general.
Los accionistas colocan recursos con la intención de recibir un rendimiento superior al que pudiese ofrecer el tener el dinero en el banco con el rendimiento de las tasas de interés. Al invertir buscan que sus capitales sean manejados de la mejor manera y es aquí en donde el consejo de administración y sus consejeros entran en acción para apoyar a los accionistas a que esto se cumpla. Como su nombre lo indica, la función del consejo de administración es aconsejar a los accionistas y un ejemplo de ello es cuando nombran al Director General , quien tendrá el encargo de la operación de la empresa para lograr un óptimo desempeño en la operación para lograr los objetivos planteados.
Si pueden tenerse las mejores prácticas de gobierno corporativo, en este triangulo de gobernabilidad de las empresas , puede lograrse que las firmas crezcan de manera óptima y controlada sin que se generen desequilibrios en su administración y de esta manera se obtenga una mayor riqueza, empleos y más actividad económica. Por algo las empresas que cotizan en Bolsa tienen un enfoque a la aplicación de las mejores prácticas.
Si se logra incrementar la cultura de buen gobierno corporativo en la sociedad en general, se podría mejorar sustancialmente el desempeño de la economía nacional. Es aquí en donde el Código de Mejores Prácticas Corporativas entra como herramienta de apoyo para lograr de manera clara y concisa tales retos. El código es emitido por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y tiene como fin ayudar a las sociedades a su institucionalización con un incremento en su competitividad. Su origen se remonta a los Principios de Gobierno Corporativo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
En relación al código y su aplicación en las instituciones, puede realizarse un estudio para conocer cuántas empresas conocen el Código de Mejores Prácticas y cuántas lo aplican en sus empresas, además del por qué se complica su implementación.
Es importante recalcar que existen otros temas relevantes en el Código de Mejores Prácticas Corporativas: la función de Auditoría, Evaluaciones y Compensaciones, así como Finanzas y Planeación, siendo en esta última, el verdadero potencial a trabajar con la planeación estratégica por escenarios, hacer uso de la prospectiva y controlar el alcanzar los objetivos, proponiendo con esto nuevos esquemas.
Lo que pretende el Comité de Gobierno Corporativo Jurídico y Financiero del IMEF para este año 2012 es apoyar a la comunidad financiera y a nuestro país a desarrollar una cultura hacia las mejores prácticas de gobierno corporativo mediante la investigación y creación de propuestas que tengan como fin el que las empresas y organizaciones trasciendan en el tiempo.
El crecimiento del PIB en México ha estado por debajo de la media comparado con otros países emergentes. El interés general acerca de este apasionante tema es que se apoye que las empresas tengan un ciclo de vida mayor al promedio generado hasta ahora, adoptando las mejores prácticas de gobierno corporativo que coadyuven al crecimiento del mercado interno.
*Guillermo Vázquez Camarena es presidente del Comité Técnico Nacional de Gobierno Corporativo y Jurídico Financiero del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).