Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

OPINIÓN: La conexión de Gran Bretaña con las decapitaciones de ISIS

Se dice que el primer ministro británico sabe quién es el verdugo de ISIS, aunque no dará a conocer su identidad por razones operacionales
mié 17 septiembre 2014 08:44 AM

Nota del editor: Peter Bergen es analista de seguridad nacional de CNN, vicepresidente de la Fundación New America y autor del libro Manhunt: The Ten-Year Search for bin Laden.

(CNN) — Ya decapitó a otra persona. Me refiero al británico enmascarado con acento londinense que trabaja para ISIS .

Sus dos primeras víctimas fueron periodistas estadounidenses. Su tercera víctima fue uno de sus compatriotas, el trabajador humanitario David Haines.

El primer ministro de Reino Unido, David Cameron, convocó a toda prisa a sus principales asesores de seguridad nacional durante la mañana del domingo 14 de septiembre para discutir qué se puede hacer.

Según las autoridades británicas, Cameron conoce la identidad del verdugo británico.

También sabe que el verdugo ya mató a dos ciudadanos del aliado más cercano de su país y sabe que tiene cautivos a al menos dos ciudadanos estadounidenses más.

Publicidad

Cameron sabe que el verdugo tiene más rehenes occidentales y que es parte de un grupo de secuestradores británicos que trabajan para ISIS, a los que sus cautivos apodaron Los Beatles. Sabe también que la vida de los rehenes restantes está en peligro.

Para Cameron es una auténtica crisis que pone de relieve un hecho grave: la cantidad de ciudadanos británicos que se han ofrecido como voluntarios para ir a Siria a luchar es 25 veces mayor (en proporción a la cantidad de habitantes) que la de estadounidenses. Unos 500 ciudadanos británicos han viajado a Siria para luchar, al igual que 100 estadounidenses. La población de Reino Unido es de aproximadamente una quinta parte de la de Estados Unidos.

CNN obtuvo un análisis que el gobierno británico llevó a cabo a través de la Oficina de Seguridad y Contraterrorismo, en el que se muestra que los británicos han arrestado a 69 personas este año por "delitos de terrorismo relacionados con Siria" y que incluyen la financiación y la preparación de actos terroristas y la asistencia a campamentos de entrenamiento terrorista.

En 2013 arrestaron a 25 personas en Reino Unido por delitos similares, lo que suma 94 arrestos en total, de acuerdo con el análisis del gobierno británico. En contraste, solo se ha arrestado a ocho personas por delitos similares relacionados con Siria en Estados Unidos.

La guerra en Siria atrae a combatientes británicos de todas las etnias, no solo a los de ascendencia siria. Un funcionario británico dijo a CNN que la gran mayoría de combatientes británicos que van a Siria no tienen más lazos con el país que el deseo de pelear en una guerra santa en contra del régimen de Bachar al Asad.

Alarmado por la amenaza que representan sus ciudadanos que combaten en Siria, el gobierno británico ya se negó a emitir o canceló 23 pasaportes y también revocó la ciudadanía a ocho británicos, según la Oficina de Seguridad y Contraterrorismo.

La agencia subrayó que también representan una amenaza los ciudadanos europeos que han viajado a Siria ya que pueden viajar libremente por la Unión Europea (incluido Reino Unido) y también pueden viajar a Estados Unidos porque son ciudadanos de países incorporados al programa de exención de visas.

Según el gobierno británico, han viajado 700 combatientes desde Francia a Siria; 400 de Alemania; entre 300 y 500 de Bélgica; 130 de Holanda; más de 100 de Dinamarca; 100 de Austria; 80 de Suecia, y entre 50 y 100 de España.

El gobierno británico también estima que unos 100 canadienses han dejado su país para "respaldar o entrenar con los movimientos terroristas en el extranjero. Es probable que la mayoría esté en Siria". Además, estima que hay 60 australianos combatiendo en Siria e Iraq y que hay unos 100 facilitadores australianos que ayudan a que esto ocurra en Australia.

Así, entre 2,620 y 2,870 occidentales han luchado en Siria, según el análisis de la dependencia británica, que probablemente es el estimado más confiable hasta la fecha.

A pesar de que el gobierno británico identificó al verdugo de los dos periodistas estadounidenses y de David Haines, no dará a conocer su nombre "por razones operacionales".

Eso se debe a que tal vez la única esperanza para los rehenes restantes es una especie de operación de rescate similar a la que llevó a cabo el Comando de Operaciones Especiales Conjuntas de Estados Unidos el 4 de julio, que no logró su objetivo porque hacía poco que movieron a los prisioneros del lugar en el que los tenían cautivos en Siria.

Una operación de rescate tendría pocas probabilidades de éxito, pero en este punto tal vez sea la única oportunidad para salvar la vida de los rehenes restantes. David Cameron lo sabe, al igual que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama.

Las opiniones recogidas en este texto pertenecen exclusivamente a Peter Bergen.

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad