Publicidad

Síguenos en nuestras redes sociales:

Publicidad

OPINIÓN: Trump hizo lo imposible, ahora regala votos a los demócratas

Los fans del hombre de la gorra roja de Make America Great Again podrían estar a punto de recibir malas noticias, comenta Dan Obeidallah.
lun 15 octubre 2018 11:26 AM

Nota del editor: Dean Obeidallah fue abogado; conduce el programa The Dean Obeidallah Show, que se transmite diariamente por la estación estadounidense SiriusXM, y es columnista del sitio The Daily Beast. Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente al autor.

(CNN) - Digan lo que digan sobre Donald Trump (y créeme, yo he dicho mucho), debo quitarme el sombrero ante él por haber hecho lo que para muchas personas parecía imposible: lograr que los demócratas se emocionen por votar en unas elecciones intermedias. Al hacerlo, incluso podría devolverle la grandeza al Partido Demócrata.

En una encuesta que el Washington Post publicó el domingo 14 de octubre se demostró lo que vimos en una investigación de CNN la semana anterior: los electores demócratas están entusiasmados por votar en las elecciones de 2018. Se determinó que en términos de entusiasmo para votar este noviembre, los demócratas tienen una ligera ventaja de dos puntos porcentuales sobre los republicanos, 81 contra 79 por ciento.

Si pensaste que un margen de dos puntos porcentuales no es mucho, estás equivocado.

OPINIÓN: ¿Cómo se moverá el tablero electoral para Trump?

Como verás, a los republicanos suele emocionarles votar en las elecciones intermedias. En octubre de 2014, por ejemplo, el entusiasmo de los republicanos fue del 75%, muy cercano al actual 79%; sin embargo, la verdadera historia es la siguiente: en 2014, el entusiasmo de los demócratas fue de solo 63%. ¡Ahora subió asombrosos 18 puntos!

Publicidad

Además, una encuesta de CNN que se publicó el martes 9 de octubre reveló que el entusiasmo de los electores demócratas está en su punto máximo desde 2009. De hecho, el 40% de los demócratas dice que se siente "extremadamente entusiasmado" por votar, lo cual sorprende porque esa cifra es apenas un 5% más alta que en 2008, año de elecciones presidenciales en las que elegimos al primer presidente afroestadounidense.

Entre los grupos demográficos que suelen votar por los demócratas (los jóvenes y las personas de color), el entusiasmo por votar también ha subido mucho. Como se determinó en la encuesta del Washington Post, el entusiasmo entre los electores de 18 a 39 años subió 25% con respecto a 2014 y el de las personas de color subió en casi la misma proporción: 24 puntos.

Lee: California lidera la "rebelión" climática contra Trump

¿Por qué es importante el entusiasmo? Es simple: la participación es la clave de todas las elecciones… pero esto es particularmente importante en las elecciones intermedias dado que la participación es usualmente más baja que en las elecciones presidenciales. Por ejemplo, en las elecciones presidenciales de 2016, la participación fue del 55%, mientras que en las elecciones intermedias de 2014 la participación de los electores fue de apenas el 36.4 por ciento.

Esto significa, en términos prácticos, que los votos de las elecciones intermedias podrían tener más impacto en los resultados. Generalmente, entre más emocionada esté la gente por votar, más probabilidades hay de que aparten tiempo en el día para emitir su voto.

Claro que no se puede garantizar un resultado dado, pero cuando combinas este entusiasmo con otros factores que se han revelado en las encuestas, los fans del hombre de la gorra roja de Make America Great Again podrían estar a punto de recibir malas noticias.

OPINIÓN: El golpe suave contra Trump, un golpe contra la democracia de EU

En la encuesta de CNN también se determinó que la diferencia entre los electores que respaldan a los demócratas y los que respaldan a los republicanos en unas elecciones intermedias es la más amplia desde 2006: el 54% de los posibles electores respaldará a los demócratas, a diferencia del 41% que votará por un republicano.

Entonces ¿qué pasó en 2006? Los demócratas ganaron 30 escaños en la Cámara de Representantes y seis en el Senado. Obviamente el país ha cambiado mucho políticamente desde 2006 en términos de hiperpartidismo, pero los demócratas solo tienen que ganar 23 escaños para controlar la Cámara de Representantes y dos para hacerse con el control del Senado. (En realidad, el Senado es más desafiante para los demócratas, dada la cantidad de escaños que se votarán este año).

Además, la historia nos indica que hay otra pregunta en las encuestas que podría predecir si habrá una "oleada demócrata" el 6 de noviembre: "¿Preferiría ver al siguiente Congreso en control de los demócratas para que funja como contrapeso de Trump o en control de los republicanos para que respalden el proyecto de Trump?".

OPINIÓN: La astucia del funcionario que quiere dirigir EU sin Trump

La encuesta del Washington Post nos indica que el 55% de los electores quiere que los demócratas controlen el Congreso para que sean un contrapeso a Trump, en comparación con el 39% que quiere elegir a los republicanos para que ayuden a Trump.

Bueno, pues a los electores se les hizo una pregunta parecida poco antes de las elecciones intermedias de 2010, sobre el entonces presidente, Barack Obama. ¿Cuáles fueron los resultados de ese año? Una gran oleada republicana: los republicanos ganaron 63 diputaciones, con lo que se hicieron con el control de esa cámara, además de que ganaron seis escaños en el Senado.

El punto es que la clave para el éxito en las elecciones intermedias es el entusiasmo. Gracias a Trump, el entusiasmo de los demócratas está en niveles récord. Si esto se mantiene, es probable que en la noche de las elecciones, Nancy Pelosi y Chuck Schumer tengan que enviar a Trump una gran carta de agradecimiento por hacer que el Partido Demócrata vuelva a ser grande.

Consulta más información sobre este y otros temas en el canal Opinión

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad