Un banquero excepcional
Nota del editor: Este artículo fue publicado en abril de 2010 en la edición 1037 de la revista Expansión, meses después del nombramiento de Medina Mora como CEO del negocio de la Banca de Consumo para las Américas y presidente del consejo global de la Banca de Consumo de todo Citi.
En el tercer piso del edificio central de Citigroup, ubicado en pleno centro de Manhattan, una olla de barro negro hecha por artesanos de Oaxaca posa en una base de madera.
La artesanía, ubicada en medio de un pasillo, se integra sorprendentemente bien con las discretas y elegantes oficinas del comité directivo del banco. Justo frente a ella está la única oficina del área cuyos libreros y paredes lucen vacíos. "Ya estamos buscando cuadros de artistas mexicanos para decorarla", dice Manuel Medina Mora, quien a principios de 2010 fue nombrado por Citigroup como CEO del negocio de la Banca de Consumo para las Américas y presidente del consejo global de la Banca de Consumo de todo Citi, responsabilidades que se sumaban a las que ya tenía como presidente y CEO de Citigroup en América Latina y en México.
Medina Mora dejará de ser presidente de los Consejos de Administración de Grupo Financiero Banamex y Banco Nacional de México partir del 15 de noviembre del 2016, según informó la institución bancaria este miércoles.
Estuvo en la posición más alta que ha ocupado un mexicano en una corporación global de la envergadura del Citi, al frente de la banca minorista de Estados Unidos y Canadá, en donde Citigroup gestiona más tarjetas de crédito de las que hay en México y donde tiene depósitos por un valor equivalente a 80% de lo que poseen los mexicanos en sus cuentas.
Como presidente del comité directivo de consumo global, Medina Mora lideraba las más de 4,000 sucursales que el Citi tiene en 38 países, en donde atiende a más de 46 millones de clientes. Este negocio representa una tercera parte de los ingresos totales del corporativo.
"Manuel es un banquero excepcional que ha llevado nuestra franquicia en América Latina a un nuevo nivel", dijo Vikram Pandit, el CEO de Citigroup, cuando anunció el nuevo cargo de Medina Mora .
"Trae consigo una combinación singular de experiencia y conocimiento para conducir nuestro negocio de consumo y lograr que Citi obtenga ganancias y crecimiento sostenidos", afirmó Pandit.
Una poderosa capacidad analítica, una capacidad de ejecución notable, rodearse de equipos talentosos y duraderos y un enfoque disciplinado en los resultados llevaron al mexicano a tener su escritorio a sólo tres puertas de la oficina de Pandit, su jefe directo.
Ambos trabajan en el tercer piso del edificio ubicado en el 399 de Park Avenue, a una cuadra de la emblemática torre Citicorp, un enorme rascacielos rematado con un techo en diagonal. Ahí fue donde, en abril de 1988, nació el que entonces era el banco más grande del mundo, cuando Citicorp se fusionó con Travelers bajo la batuta de Sanford Weill. Esa operación batió todos los récords al sumar un valor de 70,000 millones de dólares (MDD).
Las cosas han cambiado. Pandit, nacido en India, encabeza el Citi desde diciembre de 2007, cuando sustituyó a Chuck Prince. A él y a Medina Mora les toca lidiar ahora con la crisis financiera que llevó al gobierno de Estados Unidos a rescatar a este grupo con una inyección de capital de 45,000 MDD.
El banco ha regresado menos de la mitad de estos recursos; pero, aun así, el gobierno estadounidense sigue siendo su principal accionista, al poseer una cuarta parte de las acciones del grupo.