10 objetos que no debes comprarle a tu familia cuando vas de vacaciones

Es una parte esencial de cualquier viaje, una actividad en la que todos participamos. Sin embargo, casi ninguno de nosotros es bueno en comprar recuerdos. En lugar de ser una parte disfrutable de la experiencia de viajar, muy a menudo se convierte en un esfuerzo obligatorio.

La economía global para las compras de recuerdos mal concebidas es asombrosa.

Tan solo en 2013, los turistas gastaron un total de 2,300 millones de dólares (casi 30,000 millones de pesos) en recuerdos que luego fueron ignorados, no utilizados, desapreciados, no portados, desechados, que no les gustaron, ridiculizados y/o amontonados en cajones y partes traseras de los closets para no volverlos a ver nunca.

Lo peor, los turistas gastaron 427 millones de horas agregadas preocupándose por las compras de inútiles artilugios, chucherías, baratijas y cosas que se iban a empolvar.

Está bien, inventamos todas esas cifras, pero debido a que las playeras que dicen “Singapur es una Buena Ciudad”, los encendedores del presidente Mao, los koalas de peluche y los aviones jumbo inflables abundaban en la oficina de CNN Travel, estamos bastante seguros de que las personas gastan mucho dinero y tiempo en compras desesperadas que injustamente obligan a quienes las reciben a colgar estos dudosos premios durante los siguientes años.

La buena noticia es que es fácil mejorar tu entendimiento de las compras de recuerdos.

Evita los errores comunes de compras que te presentamos en la galería y tus familiares, amigos y compañeros de trabajo en realidad podrían comenzar a esperar con ansias tu regreso a casa.

¿Tienes un consejo para comprar un recuerdo? ¿Alguna vez recibiste un recuerdo terrible? ¿Uno grandioso? Comparte tus experiencias en la sección de comentarios.

Esta historia fue publicada originalmente en 2013.