A unos días de haber iniciado el segundo semestre del año, la Secretaría de Economía (SE) anunció que en los últimos 15 meses México logró una cifra récord en materia de Inversión Extranjera Directa (IED). Así, la suma reportada fue de US$44,000 millones y la buena noticia es que todo apunta a que al cierre de este año, el país podría aspirar a la cantidad de US$25,000 millones.
Desde 2013 con la compra de Grupo Modelo por parte de la cervecera belga Anheuser-Busch InBev (AB InBev), México incrementó de manera considerable la IED. Sin embargo el ritmo, se prevé será constante gracias a la serie de Reformas en materia de Telecomunicaciones y Energía. Incluso, cabe la posibilidad de que el ritmo de IED anual se mantenga, a partir de 2015, en US$30,000 millones.
En medio del Mundial Brasil 2014 y polémicas rondas, hoy la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión es una realidad de la que ya hay un poderoso interesado: la empresa Huawei, proveedor chino a nivel global de soluciones de Tecnologías de Información y Comunicaciones (TIC). La idea es ofrecer en México smartphones a precios bajos a fin de que más población tenga acceso a la ubicuidad.
Pero, probablemente la mayor aportación será la inversión en infraestructura que el titán chino pretende hacer en México, pues también será responsable de desarrollar redes robustas y así asegurar a los usuarios que tendrán una red competitiva y de calidad. Por lo pronto, la empresa ya opera en el país como proveedora para Telcel, Iusacell, Telefónica Móvil y Nextel de la tecnología Long Term Evolution (o 4G).
La promesa de una importante inversión por parte de Huawei en el mercado mexicano cada vez cobra más certeza pues, de acuerdo con datos publicados por ella misma, durante los últimos 10 años ha destinado el 10% de sus ingresos a la innovación. De hecho, tan solo en 2013 dirigió 14% de sus ingresos por concepto de ventas (US$5,400 millones aproximadamente) hacia investigación y desarrollo para incrementar su capacidad y territorios.
Nuevos jugadores están listos para formar parte de dos sectores con gran potencial. Con estas recién aprobadas Reformas más las pendientes en materia de Energía, México y su sector empresarial deben prepararse para operar en un ambiente de negocios multicultural, con nuevas reglas respecto al intercambio comercial. Por tanto, contar con la asesoría de instituciones financieras con amplia experiencia en comercio exterior, dejó de ser una necesidad para convertirse en una obligación.